Un bellaco despachero
de una manera brutal
ha muerto con un puñal
a un borracho zapatero.
En la calle de San Pablo
esquina con Maturana
se hizo la acción insana
por un cholo mui rediablo;
por ocación de un bocablo
que no era zalamero
se armó de un puñal de acero
el cholo Pedro Mejia
i la hiso grande aquel dia
un bellaco despachero.
Castillo estaba bebiendo
i por causa del licor
con groseria i furor
formó un barrullo estupendo;
Pedro Mejia esto viendo
le dijo: «fuera animal»;
el otro no oia mal
i lo atacó al lado afuera
formandose pelotera
de una manera brutal.
Al principiar la rencilla
Mejia metió el cuchillo
al desgraciado Castillo
en toda la pantorrilla;
cayó el herido en cuclilla
i rodó por un barrial;
siendo la herida mortal
al poco rato espiró
i de ese modo sé yo
ha muerto con un puñal.
Al fin pillaron al cruel
autor del asesinato
i amarrado como un gato
lo llevaron al cuartel;
confesó todo el pastel
i dijo mui placentero
que era él el bandolero
autor de aquel desacierto
dijo: solamente he muerto
a un borracho Zapatero.
Me lo tienen bien seguro
al mui sanguinario i pillo
con una barra de grillo
en un calabozo oscuro;
este cuiminal maduro
no se arrepiente lectores;
vive ahí como entre flores
mui contento de su suerte
hizo su alevosa muerte
en un burdel de licores.