En Temuco ha aparecido,
Siendo la impresion del dia,
Un afamado bandido
Que es costal de alevosía.
Si quieres lector amado
Comprender lo que te cuento,
Pon atencion un momento
Y así serás agradado.
Cinco años van pasados
Que un criminal conocido,
En Concepcion perseguido
Se encaminó a la Arjentina
Y no hallando rica mina
En Temuco ha aparecido.
Es Belarmino Mendoza
A quien referirme quiero,
El mas feroz bandolero
Que acariciara la espoza;
Puso piés en polvorosa
Al ver que la policía
Tan tenaz lo perseguia
Por donde quiera que andaba,
Con justicia que sobraba,
Siendo la impresion del dia.
Siguiéndole bien la pista
En una quebrada baja,
Durmiendo en choza de paja,
La policía algo lista
Por temor que se resista
Rodeó mui bien ese nido;
Pero todo fué perdido
Porque a deciroslo voi,
Cómo se les escapó
Un afamado bandido.
Al verse así enjaulado
Este sanguinario leon,
De tripa hizo corazon
Y sacó de su costado
Un puñal mui afilado;
Corta la quincha a porfía,
Luego en su estrella se fía,
Por la yerba se desliza
Y se arrancó a toda prisa
Un costal de alevosía.
Al rio se les tiró,
Dejando como quien dice
Con un palmo de narices
A quien aquel acto vió.
Hoi dia ya apareció
Por ignorado camino
Aquel audaz asesino.
Señores: barba en remojo……
Durmamos con solo un ojo
Por mirar a Belarmino.
PANCHO ROMERO,