Que viva el pueblo arjentino
por su gran revolucion,
pues que salvó a su nacion
de un mandatario sin tino
Hacía tiempo bastante
que la Arjentina sufria
de un mandon la tirania
mas torpe i avergonzante.
porque era este gobernante
un usurero cochino
que no tenia otro sino
que llenar bien su bolsillo,
porque ha votado a ese pillo
que viva el pueblo arjentino.
En diversas ocaciones
este mandatario truhan,
llamado Juarez Celman,
hizo varias emisiones
que acendian a millones
i puso en circulacion
sin mas autorizacion
que su sola conveniencia
i el comercio iba en falencia
por su gran revolucion.
A las tres o poco mas
se alzó el batallón Primero
i despues el derrotero
siguieron otros de atras;
la Artillería ademas
prestó su cooperacion
i al Palacio del mandon
atacaron desde luego;
no importa el desasociego
pues que salvó a su nacion.
A las doce el tal Juarez
se escapaba para un buque;
mas asustado que un tiuque
i escapando bien el guares;
jugó a los nones o pares
i el veleidoso destino
le señaló por camino
el desprecio i el destierro;
asi se castiga el yerro
de un mandatario sin tino.
Que viva el pueblo valiente
que con su grande heroismo
ha barido el despotismo
i de todo el Continente;
¡que el incensato o demente
que pretenda hacerce rei
o que trate como a grei
de bueyes a su pais,
córtele el cuello a raiz
la cuchilla de la lei!
Nota: Miguel Ángel Juárez Celman fue presidente de Argentina del 12 de octubre de 1886 al 6 de agosto de 1890