Por una mirada un peso,
Por una sonrisa tres.
Por un beso un condorito,
Me cobró la bella Ines.
La Inés siendo tan hermosa
Se pasea entre las flores.
Por eso los amadores
La miran como una rosa.
La belleza de la diosa,
Sirve a muchos de embeleso,
No falta un roto sin seso
De tantos que hai hoi en dia,
Que le diga: te daria
Por una mirada un peso.
Si no me dice te adoro,
Oh Inés, me muero de pena,
Porque con una cadena,
Estoi triste y siempre lloro.
La gracia y delicia imploro,
Yo sin ningún interes;
Y un suspiro a cada mes,
A donde nadie lo viera,
De regalo yo le diera
Por una sonrisa tres.
Desde el dia en que la ví
Sentí en mi pecho un dolor;
Pero aquel impuro amor
En nada lo convertí.
Por ver si me daba el sí,
Clamé a la justicia, a grito;
Con su cara de anjelito,
A su casa me invitó.
Ella, pero me pidió
Por un beso un condorito
Era tanta su belleza
Que no hai con qué comparar;
Cuando la llego a mirar
Casi pierdo la cabeza;
Se epodera una tristeza,
De mí, por primera vez.
Y ella con mucha honradez,
Al verme, yo, en su regazo,
Diez pesos por un abrazo
Me cobró la bella ines.
Al fin si la Ines se casa
Con otro, pierde el derecho;
Mi corazón entre el pecho,
Batalla y se despedaza;
Viendo que el desden lo abraza
Gusto no puede tener;
Se siente desfallecer.
Ya no pudiendo latir,
Se cree que va a morir
Por una ingrata mujer.