Judas mui desesperado
Toda la noche corrió,
Despues en un circo moro
El infame se ahorcó.
Preso el maestro divino
A Judas en realidad
Se le dejó en libertad
En aquel mismo camino;
El villano sin destino,
Comprendiendo su pecado
Que el mismo habia entregado
Al inocente cordero,
Tomó un oscuro sendero
Judas mui desesperado.
Maldito de mí decia,
Soi un pobre condenado
Por haber yo traicionado
Al buen hijo de Maria;
Aquel que tanto queria
Miserablemente oyó
Lo he vendido, esclamó,
Por plata cobardemente,
I asi hablando tristemente
Toda la noche corrió.
Al pasar, pues, el traidor
Frente al pórtico de un templo
El dinero para ejemplo
Votó lleno de furor
Hácia un monte con valor
Se fué ya sin el tesoro,
Allí formando un gran lloro
Maldecia de su suerte,
Encontrando al fin la muerte
Despues en un circo moro.
Del circo moro pendiente
Su cuerpo, al fin es hallado,
Pero tan desfiurado
Que hacia temblar la jente;
En su rostro, ciertamente.
El delito se pintó,
Al verlo el público huyó
Según la historia asegura,
Porque lleno de locura
El infame se ahorcó.
Amiguito, finalmente.
Así pagó su delito
Aquel apóstol maldito
Ahorcándose cruelmente
Si el traidor últimamente
Al verse ya desgraciado
Hubiera el pan acertado
Aquel que habia vendido
Se habria ya arrepentido
I estaria perdonado.