En Ercilla últimamente
Un gran crímen ocurrió
Viva su mujer quemó
Un salvaje delincuente.
Baldomero Castro fué
El Neron de que les hablo
Este hombre vuerto diablo
Quemó a su mujer diré.
Primero comenzaré
A decir que el indolente
A su mujer inocente
De las manos le amarró,
I ya verán que pasó
En Ercilla últimamente
Atada la pobre esposa
La colgó en una cocina
I el cuerpo con parafina
Le empapó con fé pasmosa.
Luego una llama monstrosa
A la ropa le acercó
La infeliz es claro ardió
En medio del tormento
I en Ercilla sin mas cuento
Un gran crímen ocurrió.
La huincha en que fué colgada
Se quemó al fin con el fuego,
I la infeliz cayó luego
Gritando desesperada.
Ardiendo encarbonizada
A una casa llegó
Por la voz solo se vió
Que esta era criatura,
I así Castro sin cordura
Viva su mujer quemó.
Cuando ya vió consumado
Su crímen el asesino
Echó los pies al camino
Quizás adonde el malvado.
La policia ha buscado
Al salvaje activamente
El Neron astutamente
Busca en la fuga su abrigo;
I así huye de castigo
El salvaje delincuente.
Por fin, concluyo diciendo
Que Castro mató a su esposa
En forma tan horrorosa
Por placer de verla ardiendo.
Hoi el salvaje anda huyendo
Por los bosques como fiera
Ojalá que Dios quisiera
Que al fin se le capturase
Para que él tambien pagase
Su crímen en una hoguera.