A este raro pajarraco
don Juan Rafael Allende
le ha dicho i él no se ofende)
con todas sus letras: Caco,
¿qué le importa a este bellaco
que le claven bien la espuela
si ante el espejo i con vela
él se mira otro Narciso?
Aquí esclamar es preciso:
¡no hai ediondo que se huela!
Que Caco no mas le ha dicho?
nó, le ha dicho mucho mas;
de adelante para atras
lo ha pintado el pero vicho!
I esto no ha sido capricho
pues la verdad le acompaña;
lo ha llamado sin entraña
i sedienta sanguijuela;
con el taco i con la suela
ha pisoteado a esta araña.
I Figaro en sus cabales
qué no ha dicho a don Joaquin?
Congresal de estilo ruin
de epitetos de arrabales;
dice que no tiene iguales
como esplotador goloso,
que borre si es poderoso
con su audacia desmedida
su reputacion podrida
i un pasado bochornoso!
¿Que será (le dice) aquel
cínico conservador
que llegando vencedor
se ha encerrado en el papel
de ejercer venganza cruel
con la saña de un chacal?
CONTESTO — ¡es un animal
que husmea la sangre humana;
de la doctrina cristiana
el defensor principal!
Eccolo qua, mi lector,
el tipo de mayor gloria,
la columna meritoria
del bando conservador!
Vengativo sin pudor
verdugo cobarde i fiero,
cernicalo salitrero
de uña larga i encorvada;
esta es la mejor espada
que hoi dia defiende al clero.
Tengo que ver a esta fiera
en no mui lejanos dias
pagando sus picardías
en alguna ratonera;
el que habla de esta manera
fué victima de su saña;
en la forma mas estraña
fuí vilmente perseguido
ya mi padre habia sido
atacado por su maña!