Una lucha no sangrienta
se librará prontamente
Punta Arenas de repente
ha caido en la tormenta.
Cincuenta mil arjentinos
desde el puerto de Gallegos
han marchado con sociego
a trancar nuestros caminos.
Los soldados i marinos
de aque la lejion violenta
llegan como fiera hambrienta
a invadir nuestros terrenos
i a librar con los chilenos
una lucha no sangrienta.
Si el Estrecho se tomaran
aquellos bravos titanes
i de todo Magallanes
sus piezas se apoderaran
i el paso fortificaran
en forma tan imponente
seria imposible, actualmente
atravesarla alguna armada
i una batalla malvada
se librará prontamente.
Al puerto de Punta Arenas
en menos de una hora
la fuerte hueste invasora
se lo toma á serena.
Nuestra guarnicion chilena
que siempre ha sido valiente
se rendirá casualmente
I en poder de los cuyanos
se encontrará, mis hermanos,
Punta Arenas de repente.
Una derrota completa
tendrá nuestra guarnicion
e invadida la nacion
queda, según la opereta.
Nuestro Gobierno decreta
una defensa sin cuenta
la armada lista i atenta
entrará en accion lijero
porque todo Chile entero
ha caido en la tormenta.
Por fin, qué fritos estamos
por el diario «La República»
i en una derrota pública,
por su escritor nos hallamos
las luchas que presenciamos
en Punta Arenas da horror
yo aseguro que el valor
mostrado por los cuyanos
solo han sido sueños vanos
que soñó un loco escritor.