Con paso mui tembloroso
Al banquillo se acercó,
en él luego se sentó
con tranquilidad i reposo.
Cuando la iglesia dejaba
para marcharse al cadalzo
lo hizo con paso falso
porque al parecer temblaba.
El padre que lo auxiliaba
caminaba silencioso
mirando al facineroso
que algo de vil se mostraba
i al suplicio caminaba
con paso mui tembloroso
Cuando llegó el delincuente
al lugar de su suplicio
se hincó i con entero juicio
saluda a toda la jente.
Volviéndose al otro frente
a los reos allí vió,
con tristeza los habló.
en tan penosa ocasion
i pidiéndole perdon
al banquillo se acercó
Antes de subir a él
levantó su vista al cielo
para pedir un consuelo
a Dios i su gran poder
Ese auxilio, al parecer,
con devocion lo imploro;
cuando ya le pareció
que Dios le habia perdonado
miró el banco desgraciado
i en él luego se sentó.
El verdugo prontamente
en el cadalzo le ató
i la vista le vendó
con presteza de serpiente.
El piquete salió al frente
con un aire majestuoso
sobre el gran facineroso
una descarga lanzó
la que el reo recibió
con tranquilidad i reposo.
Por fin, se allegó un sarjento
al cuerpo del desgraciado
i un tiro de gracia ha dado
en sus sienes al momento.
La jente con sentimiento
la trajedia presenció
i luego se retiró
impresionada, me creo,
mientras que el alma del reo
en la gloria penetró……
Es propiedad del autor.—Se prohibe la reimpresión de estas poestas
JUAN B. PERALTA, Galvez S26.
Imp. Santa Rosa 252 ant.