Un salvaje asesinato
En un pobre ejecutaron
Despues que le dieron muerte
La cara se la pelaron.
El dieziseis del presente
A las nueve de la noche
Se presentaron en coche
Tres bandidos mui decentes
A casa de un escribiente
Llamado Ramon Nonato
Pidieron permiso un rato
Para poder remoler
Hicieron despues en él
Un salvaje asesinato.
En aquella diversion
El dueño de casa advierto
Por los bandidos fué muerto
Con la mas negra traicion
La cara ¡qué compasion!
Le pelaron al inerte
El criminal se divierte
De ese modo con la jente
Huyeron tranquilamente
Despues que le dieron muerte.
Cuando el crimen cometieron
Los feroces asesinos
Buscando el mejor camino
La fuga pronto emprendieron
Tres políciales salieron
Pero no los encontraron
Cuando al cuartel regresaron
Dijeron todos visible
El crímen el mas horrible
En un pobre ejecutaron.
El juez mui apresurado
A tal suceso ocurrió
I cuando lo presenció
Quedó triste i asombrado
En el momento un soldado
Con dos mas se lo llevaron
En el cuartel lo velaron
Pero los diablos temidos
Para no ser conocidos
La cara se la pelaron.
Por fin si pillados fueron
Los autores por su puesto
Háganlos que paguen presto
El crimen que cometieron
Ya ven la muerte que hicieron
Tan salvaje i tan brutal
La policía rural
Vea modo de pillarlos
I mui presto presentarlos
A la casa paternal.
PEDRO VILLEGAS.
Impreso por P. Ramirez.—Echáurren, 6.