El minero en inverná
cuando a la puerta se asoma
lo mismo que a una paloma
la cordillera terá.
Mirando el año bisiesto
me marché a la cordillera
sin temer a ni una fiera
el hecho que manifiesto,
pero el voraz elemento
nortecillo i la nevá
me pegó sin caridá
quiso hacerme sucumbir,
i es lo que puede sufrir
el minero en inverná.
Cuando regresa a la cama
duerme su sueño profundo,
recuerda estar en el mundo
pero se encuentra en campaña;
en la noche no se estraña
al ver la niebla que asoma,
cubriendo la cierra i loma
en mui grande elevacion,
despues vé la nevason
cuando a la puerta se asoma.
Agosto con su alta esfera
dentró con todos sus brios
a pesar que siempre ha sido
repunte de primavera,
rigor como cualesquiera
mes que en el invierno asoma,
el siete creyó ser broma
el toldo que se formó
i la cierra la dejó
lo mismo que una paloma.
El veintitres principió
a combatir en la cierra,
pareció romper la tierra
el huracan que corrió;
i mucha nieve arrojó
al fondo de una quebrada,
toda la jente en verdá
oculta en su propio hogar
como se hace respetar
la cordillera verá.
Al fin a mis compañeros
les corrió la misma suerte,
éramos ocho se advierte
los operarios mineros;
apires i barreteros
i el empleado que aludí
denominado es allí
este verso ya lo esplica
el Cajon de Tindirica
i la mina Jertrudís
Francisco Tapia.