A muerte está sentenciado
El parricida Vergara,
Por lo que él mismo declara
En todo se haya culpado.
Como un año mas o ménos
A que este hijo intentaba
Matar al padre que amaba
A fuerza de un cruel veneno.
En todo el pais chileno
Este crímen se ha contado,
Por ser el mas obstinado
La justicia con medida
I por esta reveldía
A muerte está condenado.
Su cruel crímen cometió
Como el mas peon vendido,
Con una hachuela he sabido
Que a su padre asesinó,
Con Apablaza efectuó
La muerte que se declara,
La justicia pues prepara
Castigar al facineroso,
Pues hoi se encuentra penoso
El parricida Vergara.
Don Ismael le encargó
A Apablaza que llamase
A su padre i lo invitase
Al sitio que le indicó.
El encargado llevó
La noticia que no es rara
Luego de ahí se separa
Donde el caballero amable
I los dos se hallan culpables
Por lo que él mismo declara.
A ese tiempo salia
De casa don Isidoro,
Cuando César con decoro
Lo llama con cobardía,
La noticia le decia
Que el hijo habia mandado;
El anciano mui confiado
Marchó con justa razon
El mismo hechor por su accion
En todo se haya culpado.
Al fin la muerte merece,
No es por desearle mal,
Pero es para ejemplar
Que todo el mundo apetece.
Pero Apablaza i Meneses
Quedarán en su prision.
Acuña otro Absalon
A su padre asesinó
I mui pronto recibió
La tremenda ejecucion.
Juan B. Peralta,