Con gran pericia i contento,
travó sin igual combate
con un leon chocolate,
un esplorador violento.
En el Africa oriental
donde los leones abundan
i las praderas circundan
con el tigre i el chacal.
oculto en un matorral
habia un leon corpulento,
esperando su sustento
en un ciervo descuidado
que al pasar es devorado
con gran pericia i contento.
Un botànico atrevido
por en la selva se internaba
i descuidado pasaba
por donde estaba escondido.
Pegó la fiera un bramido,
pero el sabio no se abate
i de un estuche granate
sacó un agudo puñal
i con el fiero animal
travó sin igual combate.
Con su semblante inyectado
el leon se le vino encima;
el sabio a un àrbol se arrima
con su puñal preparado
i de este modo amparado
con resolucion se bate;
tiene descubierto el mate,
el cuerpo todo sangrando,
pero sigue batallando
con un leon chocolate.
Por mas que él defendia
su vida a brazo partido
con empuje desidido
i sobrada valentía,
llegar la muerte veia
cuando en un feliz momento,
al comerlo el leon hambriento
le mete con grande arrojo
el cuchillo por un ojo
un esplorador violento.
En ese rápido instante,
el leon mortalmente herido
dió un iracundo rujido
i en tierra cayó jadeante.
No esperó que se levante
el moribundo viajero;
hizo un esfuerzo postrero
i lo mató a puñalada.
Esta accion es relatada
casi por el mundo entero.