En Iquique mui furiosos
los del gremio se juntaron
i a cuarenta fusilaron
de aquellos mas revoltosos
En masa se reunieron
i un gran tumulto formaron,
las oficinas insendiaron
i a la pampa se dirijieron,
al poco rato volvieron
haciendo miles destrozos
sin tener nunca reposo
a las tropas atacaron
i los mineros pelearon
en Iquique mui furiosos.
Despues del combate cruel
la jente se dispersaba
i la tropa regresaba
mui tranquila ya al cuartel
al mando de un coronel,
otra vez se prepararon,
en la noche resguardaron
el pueblo con mucho orden
i para armar un desorden
los del gremio se juntaron.
Ya todo tranquilo estaba,
de improviso se vió en la plaza
que el pueblo se unia en maza
i un batallon los rodeaba,
pronto a combatir se hallaba
pero no les ordenaron;
mui luego se retiraron
cesando ya todo alarde
i en un tumulto mas tarde
a cuarenta fusilaron.
Al poco rato despues
un gran grupo se veia
de jente que con alegría
se juntaba i rapidez;
en ese instante a la vez
los Granaderos celosos,
cargaron mas que rabiosos
contra el pueblo amontonado
i fueron ahí sableados
de aquellos mas revoltosos.
Como la bulla no escampa
a pesar de ese guaraco,
de ahí se fueron a saco
con direccion a la pampa;
ahí encontraron su trampa
pues la lucha fue severa;
aquello no fué friolera
como los hechos de Iquique,
porque se fueron a pique
en todas las salitreras.