Hace poco, en Melipilla
un asesinato ha habido,
con una enorme cuchilla
la mujer mato al marido.
Esta mujer que vivia
con su marido en buen pié,
la infame causante fué
de tan torpe felonía.
El caso se refería
de un diario en la gacetilla.
Causa mucha maravilla
el ver lo que está pasando
i que así se esté matando
hace poco, en Melipilla.
La mujer vivia contenta
i feliz del matrimonio,
pero no faltó un demonio
que viniera a hechar la cuenta.
Llegó un tal Gregorio Asenta,
de los dos mui conocido,
siendo bastante atendido
por él i por su mujer
i al otro dia a mi ver
un asesinato ha habido.
La infame i el alhojado
bien pronto se comprendieron
i matarlo desieron
al marido descuidado.
Este se habia curado
i caido de la silla,
mientras su infame costilla,
con una furia que espanta,
le cortaba la garganta
con una enorme cuchilla.
El huesped salió en su ayuda
con un farol en la mano
i fué ayudador ufano
en esa tarea ruda.
Al ver la accion tan sañuda
que habian ahí cometido,
abandonaron el nido
para gozar su delito.
Por eso se dice a grito:
La mujer mató al marido.
Los busca la policía
¡Dios quiera que los encuentre
i a la càrcel me los entre
por su horrible felonia.
Hai un desgraciado dia
en que el hombre apacionado,
por la pacion desbocado,
se titula criminal,
para ser por ese mal
en segnida fusilado!