Fué el domingo en carretela
Cortinez al Resbalon,
con su compadre Chacon
viento en popa, a toda vela;
por olvidar la gabela,
por pasar un bello dia,
por dar suelta a la alegría
i hechar al aire una cana,
donde el pueblo se desgrana
buscando un rato de orjía.
Como el pùblico verà,
mas alegres que una pascua,
mas encendidos que una ascua,
mas felices que un Pachá
llegaron por fin alla
i principió la chupeta,
luego el desórden aprieta,
entre el baile i la vihuela
que la hace hablar una abuela
mientras rajea la Peta.
Sin que el pobre lo merezca
a Chacon entre unos huazos
le dieron tantos huascazos
que le sacaron la yezca;
así principió la gresca
pues Chacon se volvió ovillo
i luego con un potrillo
les tiró por la cabeza,
mientras uno con prestesa
sacó a bailar un cuchillo.
Aquel quiso hacerse un lado
pero el otro lo siguió
i el cuchillo le pasó
del uno al otro costado;
en seguida este malvado
subió de un salto al caballo
i rápido como un rayo
arrancó mas que lijero:
¿patita pà que te quiero,
pá que te téngo sin callo?
Quedó en el suelo Chacon,
agonizando un instante,
i a las seis o poco ante
no latía el corazon;
entonces por compacion,
entre dos buenos amigos
que habian sido testigos,
lo sacaron del lugar,
sin que hayan podido hallar
al hechor por esos trigos.