El verte me causa gosos
i el escucharte afliccion
i de angustia el corazon
estoi jimiendo a zollozos
Ojos claros i serenos
si por mirar sois amados
¿porque me mirais airados
i de tanta crueldad llenos?
mírame tirana al menos
que aunque sean enojosos
yo los llamaré piadosos
echándome una mentira
¡que hasta en tu mirar con ira
el verte me causa gosos.
Yo siento de vena en vena
un fuego que me quemara,
cuando te miro la cara
encantadora sirena;
i es de verdades tan llena
mi ardiente i pura pasion
que al ver tu desatension
en lenguaje cruel e injusto:
el mirarte me dà gusto
i el escucharte afliccion.
Ya llegó el instante fiero
de mi triste despedida
en que anuncio mi partida
a mi encantador lucero;
a darte el adios postrero
con gran desesperacion
en esta triste ocacion
llegó ya tu tierno amante,
lleno de llanto el semblante
i de angustia el corazon.
Ah! si las pasiones nuestras
fueran de igual violencia
el dolor de nuestra ausencia
en los dos dejara muestras;
mas tú un semblante demuestras
rebosando de alvoroso
i en esos ojos hermosos
encierras dicha i contento
cuando yo falto de aliento
estoi jimiendo a zollozos.
Murmurando un manso rio
baña el prado con sociego
i por fruto de su riego
un jardin le dà con brio;
tú, en silencio llanto mio
mi angustiado pecho bañas
sin conseguir por hazañas
con tu porfía tan vana
a esta mujer tan tirana
ablandarle las entrañas.
ROLAK