En la calle Pedro Lago
una madre sin entrañas.
buscó la tremenda maña
para hacer aquel estrago.
Esto ha sido aquí en Santiago
i dos niños son testigo
de tal hecho que yo digo.
No crean de que es mentira,
porque al pulso de mi lira
de la verdad soi amigo.
El domingo que pasó
por la calle mencionada,
la jente toda asustada
el el parbulito sacó,
i al guardian se le avisó
el delito tan funesto
Al cuartel llevaron presto,
a los niños que lo hallaron
donde solo declararon
el hallazjo tan molesto.
Buena la jente bien diabla
que no tuvo corazon
de arrojar a un cequion
a los niños de que se habla.
Por debajo la una tabla
o rieles, lector hallaron
el niñito que ahogaron
de tan horrible manera
con corazon de Pantera
i mui tranquilas quedaron