Una mujer al marido
En un licor que le dió
Terrible lo enveneno
Por irse con el querido.
Tenia formado el plan
Esta mujer tan astuta;
Por comer la ajena fruta
Perdió el perro i perdió el pan
En la ciudad de Chillan
Lo que digo ha sucedido.
La víctima sin sentido
Espiró en un cruel dolor.
Asi ultimó con furor
Una mujer al marido.
El otro infame esperaba
Que este acto ejecutara,
I despues, quien lo pensara,
Mui serena las echaba:
Cuando él no imajinaba
A la botica cortó,
Placentera allí compró
Dicho veneno tan fuerte
le echó como se advierte
En un licor que le dió.
Al poco tiempo despues
Fué pillada esta mujer.
Quien dijo que sin temer
Era culpada a la vez.
En la presencia del juez
Esto mismo declaró
Que al marido asesinó
Sin haber ningún empacho;
Que inducida por el lacho
Terrible lo envenenó.
Se encuentra ya padeciendo
La muier su atroz delito,
Pero el otro pobrecito
Por los montes anda huyendo;
Su yerro está conociendo
Mui penoso i abatido.
La mujer ha preferido
Desgraciarse de esta suerte
Haciendo la horrible muerte
Por irse con el querido.
Al fin, diré que alarmó
El suceso en la ciudad
I luego la autoridad
Varias modidas tomó.
El otro marchante huyó
Sin dejar resquicio alguno.
Para correr fué toruno,
Por eso no se ha pillado,
Sinó se habria tirado
Lo menos sesenta i uno