Acuérdate veleidoso
lo que tu me has prometido;
con alhagos lisonjeros
engañarme habeis querido.
Primeramente jurastes
prometiendo no olvidarme
i para poder cautivarme
ese partido tomastes;
ahora infiel me olvidastes
ingrato i fasineroso,
quisistes mui presuroso
dejarme en tal afliccion
lo que prometiste por razon
acuérdate veleidoso.
Ahora que estas ausente
dime si me has olvidado;
quisiera estar a tu lado
o tenerte aquí presente;
te has portado mui cruelmente
i yo jamas lo he podido;
si a otra le has preferido
mostrarle tu grato amor,
acuérdate, pues, traidor
lo que me has prometido.
Yo fuí para tí constante
i mal me correspondistes,
luego huir de mi quisistes
i me olvidas al instante:
¿no te acueadas soi tu amante?
i aquí preguntarte quiero:
¿si tu amor es verdadero
porqué me pagas tan mal?
mi ruina fuiste a labrar
con alhagos lisonjeros.
No tuve correspondencia
i por eso me lamento,
no tengo alivio un momento
i esto me causa dolencia;
tendré que pedir audiencia
al Tribunal de Cupido
i me quejaré que has sido
el labrador de mi ruina;
con la intencion mas indina
engañarme habeis querido.
Al fin yo por despedida
te dire con dulce anhelo
ya no cesan mis desvelos,
mi esperanza esta perdida,
si por tí rindo mi vida
te mostraras enojado,
ese pago hé encontrado
admirando tu ingratitud,
por eso yo, en virtud
dia i noche hé llorado,