En la ciudad de Mendoza
un gobiernista murió
i el diablo se le apareció
bailando la resbalosa
con una voz espantosa
le dijo mostrando el cuerno:
vamos amigo al infierno
que allí está buenazo
a punta de chuchazos
le hizo ver zapallos tiernos.
Fue tanto lo que corrió
el gobiernista que hablo
que aburrido dijo el diablo
este corre mas que yó,
un huascaso le pegó
con una barra de fierro
ahuyando como un perro
quedó con el papirote
i allí mismo llegó un jote
i lo transportó a un cerro.
Al fin lectores yo ví
este caso diferente
lo ví todo patente
que casi no vuelvo en sí,
esto ha sido para mi
terible como se vé,
ya señores les contè
lo queanoche yo soñaba,
con tal esadilla estaba
cuando, lector, desperté.