La mujer que tiene amores
Con algún hombre casado,
Sufre bochorno i vergüenza
El dia menos pensado.
Toda mujer, hoi en dia
Lachando se contornea,
Por mui honrada que sea
Le brilla la picardia,
Con descaro i villanía
Se entrega a los amadores;
Disfrutando de las flores
Dijo el mismo San Antonio,
Que es igual al demonio
La mujer que tiene amores.
En la viuda mayormente
Amar es escandaloso;
Si el querido es amoroso
Lo quiere, aunque hable la jente.
Yo no hallo que es prudente
Porque esto es mui reparado.
Aunque moralizado
Está, i si no se escapa
Cualquiera cae a la trampa
Con algún hombre casado.
Yo no me admiro del mundo
Sino de los habitantes
Esos que llaman amantes
Que quieren por un segundo;
Claro hablo, i bien me fundo
Dando esplicacion estensa,
Que aquella que a amar comienza
Con gran pasion halagüeña,
Si el que adora tiene dueña
Sufre bochorno i vergüenza.
Llega la propia señora
Con furor involuntario,
A vista del vecindario
Le dice descasadora,
Gorrera infame, traidora
I vos, hombre descarado,
Que haces aquí encerrado,
Fijate que no es tu casa,
Vas a ver lo que te pasa
El dia menos pensado.
Al fin, lo que yo refiero
Son hechos bien comprobados
¿Por qué admiten los casados
Habiendo tanto soltero?
Casi en el mundo entero
Esto se ha dejado ver,
Dijo el mismo Lucifer,
Con tal que nadie se acostumbre.
No tiene la culpa el hombre
Quien la tiene, es la mujer.