El reo puesto en capilla
Sin poderse resistir,
Pensando selo en morir
Al Hacedor se le humilla.
Qué tristeza i confusion
Será para un desgraciado
Al verse ya condenado
En su lúgubre prision;
Sin tener apelacion
Su conciencia pura brilla
Como con alma sencilla,
Sumerjido en gran dolor
Se encomendará al Señor,
El reo puesto en capilla.
De verse ya sentenciado
Por la Corte i el fiscal,
Se lamentará el mortal
En su aposento encerrado;
Estando bien confesado
Se preparará a partir.
Cuando ya vaya a salir
De su oscuro calabozo
Hácia el banquillo afrentoso,
Sin poderse resistir.
Antes de la ejecucion,
Según esplica la plana
De la relijion cristiana,
Le dieron la comunion.
Con Cristo i con afliccion
La hubo él de recibir,
Para dejar de existir
En completo i sano juicio;
Salió mareado al suplicio,
Pensando solo en morir.
Despues que ya recibió
Al cuerpo i sangre de Cristo,
Dijo ya me encuentro listo
Porque Dios me visitó.
Mi alma la fortificó
Aquella real maravilla,
Postrado ya de rodilla
Pidiéndole dé perdon;
De todito corazon
Al Hacedor se le humilla.
Al fin, con gran reverencia
Oyó la última misa,
En la iglesia con gran prisa
Le pidió a Dios resistencia;
Teniéndola a su presencia
En la postrera oracion,
Le hizo una esclamacion
Con santo i cariño tierno;
Roguémosle al Padre Eterno
Que le dé su salvacion.