Labra el agua sin ser dura,
Un mármol endurecido
I yo que no haya podido
Ablandar vuestra hermosura.
Parte del sitio empinado
Mi favorito elemento
Con lijero movimiento
Busca el seno que se ha creado:
Con un paso inquebrantado
Llega el viento i no se apura,
Flota una espuma segura
Airiosa la mar engrife,
I allí al mas duro arrecife
Labra el agua sin ser dura.
Los cuatro polos se avanzan
Sosteniendo sus asuntos,
En los cardinales puntos
I sobre la faz descansan;
Sus máquinas no se lanzan
Al decreto en que han nacido,
El metal empedernido
Al quererlo calcinar
El fuego puede ablandar
Un mármol endurecido.
De rios, lagos i fuentes
Nace el arroyuelo manso,
I este logra en el descanso
Triunfando de sus corrientes,
Producen las florecientes
Selvas donde hacen el nido,
Las aves desde que han sido
Vagas a mas prontitud,
Gozan de noble virtud
I yo que no haya podido.
Dama, ninfa, estrella, diosa
Comparada con la iman;
Ciertos titulos te dan
Lo mismo a la perla hermosa,
El buzo es aquel que goza
Quitarla de tanta hondura;
I vos humana criatura
Mira el fuego que proceden,
Joyeros que jamas pueden
Ablandar vuestra hermosura.
Al fin todo es natural
Fácil si a la faz se asoma,
El hombre a sus pulsos doma
En el reino mineral;
Le arrebata su metal
A una mina por razon,
Convencida la cuestion
Tomada de la colonia,
Se ablanda la calcedonia
Al choque de un eslabon.