PREGUNTAS I RESPUESTAS

Mostrar no quiero el portillo
Que has abierto aquí en mi pecho
Con tu olvido i tu desden,
Cara de capacho viejo.

    —¿Por qué, prenda idolatrada,
Delante de mi está muda?
Quieres a otro sin duda
I mi presencia te enfada.
Dime: ¿por qué tan callada
Estás cuando mas me humillo
I mi amor puro i sencillo
Te declaro? — Porque un diente
Perdí, i a un impertinenee
Mostrar no quiero el portillo.

    —¿Por qué, si en otra ocasion
De tu amor cojí la palma,
Me miras con fria calma
I sin ninguna aficion?
—Porque roto el corazón
Me dejaste, i trizas hecho
De otra cosa un largo trecho:
I por eso es que hoi, sentida,
No quiero veas la herida
Que has abierto aquí en mi pecho.

    —¿Por qué con grande injusticia
Besos i abrazos me niegas
I hasta a negarme al fin llegas
La mas sencilla caricia?
—Porque tú con tu malicia
Me pillastes en Belen,
Subistes luego al maiten,
I despues de haber subido,
Me dejaste el pecho herido
Con tu olvido i tu desden.

    —¿Por qué nunca a pasear vas
Ni siquiera vas a misa,
I engordando tan de prisa
I tan disparejo estás?
Carne no comes jamás,
I, por mas que yo forcejo,
No pruebas el vino añejo.
Por qué estás, pues, tan cambiada?
—Porque estoi embarazada,
Cara de capacho viejo!

    —¡Oh! qué placer! qué alegría!
¡Oh! cuánta felicidad!
Pero, dime la verdad:
¿Esa criaturita es mia?
Si lo fuera, yo sería
El mas dichoso viviente.
Responde inmediatamente:
¿Es mia?— Yo soi su madre….
Si tú quieres ser el padre,
No hai ningún inconveniente….

                                   El Pequen.

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