En Talagante, señores,
hubo una esplesión jigante
como diez trabajadores
murieron en un instante.
No hai diario que no relate
este hecho conmovedor
que ha causado mucho horror
en el pobre i el magnate;
es juste que yo lo trate
tambien para mis lectores;
con todos sus pormenores
yo lo tengo que hacer ver
que ha venido a suceder
en Talagante, señores.
En una pobre morada
de un huaso que iba a cazar
se habia puesto a secar
mucha poivoa mojada
estaba desparramada
en una m[e]sa desde ante,
llegó jente lo bastante
i empezó la charla a pausa
cuando, sin saber la causa,
hubo una esplosión jigante.
Se supone que un amigo
talvez por ir a fumar
fué la pólvora a incendiar
donde no dejó un testigo,
voló con ellos consigo
el rancho i los corredores
todos los alrededores
oyeron esta esplosion
i hallaron en un monton
como diez trabajadores.
No se les pudo atender
a aquellos desventurados
solo cuerpos destrozados
era cada pobre ser;
se tuvo que conmover
con un cuadro semejante,
todos pálido el semblante
cruzaban por los caminos
i esos pobres campesinos
murieron en un instante.
Las cosas que están pasando
en este pobre pais
de por sí tan infeliz
es verdad que está asustando:
es bueno ir reflexionando
con la astucia de la zorra
que con esta suerte porra
llovera escremento luego
así como llovió fuego
en Sodoma i en Gomorra.