ULTIMOS MOMENTOS DEL REO

    Qué largas las horas son
en mi reloj desdichado!
Parece que se ha parado
al ver mi tribulacion!

    Si ves que ya la fortuna
en mis males se eterniza,
¿por qué no te das mas prisa,
para librarme de la una?
A las dos,mas importuna
la suerte en mi corazon,
me anuncia que habrá perdon,
A las tres,en mi desdicha
i a quien espera esta dicha
¡qué largas las horas son.
    Llega mi desvelo a tanto,
al grito del centinela,
que a las cuatroestoi en vela,
anegado en triste llanto
A las cincoen mi quebranto
recuerdo el mal que ha pasado:
i a las seis  atormentado
de los bienes que he perdido,
de nuevo empieza el jemido
en mi reloj desdichado.

    A las sieteda el martillo
tan feroces campanadas,
que mis lágrimas cansadas
riegan a compás mi grillo.
A las ochoestoi sin brillo
pues moribundo i postrado,
conozco no haber medrado
con dar la cuerda a las nueve:
i viendo que no se mueve
parece que está parado.

    Esperando ya las diez
doi mil suspiros al cielo
por ver si hallo algún consuelo
en aquel Eterno Juez.
A las oncellego, pues,
en contínua espiración,
i a las doceen oración
al rejistrar mis tristezas
e ntrego a Dios cuerda i pesas
al ver mi tribulación.

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