Trajinando a sombra i sol
un mocito mui parado,,
de cuello alto, almidonado
i zapatos de charol,
a la luz de un buen farol
de la plaza principal,
vió a unaniña anjelical
de mui bonito bigote,
i se dijo: esta es mi dote
o yo soi un animal.
Siguió el futre paso a paso
a su cándida beldad
atravesó la ciudad
caminando por si acaso
desde el oriente al ocaso
hasta hallar su moradita
cuando ya la creyó frita
a su casa regresó
i al otro dia le envió
una amorosa esquelita.
¿I porque no he de ser franco?
todo fuè a pedir de boca:
ni era la muchacha loca
ni el futrecito era manco;
Nota: Pareciera que esta lira continua en otro documento.