Pido ingresar a la sociedad de poetas

Pido ingresar a la sociedad de poetas
por Rosalindo Farías, poeta popular de la Hacienda Tuniche, Graneros.

Yo también quiero ingresar
como los otros poetas
y si hoy alcanzo la meta
en ella podré quedar:
mi verso se va a inspirar
con mucho mayor agrado,
pa no estar equivocado
aquí les mando mi prueba,
no será grande ni nueva,
pero soy poeta honrado.

Que en la LIRA POPULAR
mi verso quede grabado,
si llega a ser publicado
mucho me habré de alegrar;
así me voy a iniciar
en esta LIRA querida,
primera vez en mi vida
que hago versos con agrado,
como obrero soy honrado
y justiciero en seguida.

Yo soy pueta de razón
y obrero muy precavío,
pues mi valor es sabio
lo tengo en el corazón;
mi más querida ambición
es mi diario generoso,
por él me siento dichoso,
tengo mi buen ejemplar
al SIGLO voy a brindar
con mi ingreso valeroso.

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En gustos no hay nada escrito

En gustos no hay nada escrito
por Alejandro, poeta popular de Santiago.

Toditos dicen que en gustos
hoy no se halla nada escrito
y que el hombre más bonito
tiene mujer que da susto;
algunos miran el busto
pero otros las pantorrillas
mas a algunos las mejillas
les harán agua la boca
y algún viejo como roca
se muere por las chiquillas.

Algún largo y aflautado
con una mujer chiquita
y una muchacha bonita
enredá con un casado;
y aquel gordo y achatado
que eligió para costilla
a una flaca chiquilla
que sube de un metro ochenta
y que mira muy contenta
que él le llega a las rodillas.

Una vieja muy retiesa
que tiene como noventa
sale a pasear muy contenta
vestida de vampiresa;
otra lleva en la cabeza
algo como regadera
pero que cree sincera
que lleva puesto un sombrero
y a un perfecto caballero
besando a la cocinera.

He visto a un sablo eminente
leyendo muy a escondidas
las revistas prohibidas
con historias indecentes:
y aquel campeón tan valiente
no se atreve a una mujer
a decirle su querer
y a un señor dentrado en años
por la cerradura ‘el baño
viendo lo que no ha de ver.

DESPEDIDA

En fin para terminar
en gustos todo se puede
por eso usted no se quede
y búsquela hasta encontrar;
mas si le llega a fallar
la vieja seca y rulenga
búsquese otra, pues, que tenga
los ojos güeltos pal norte
y una nariz de este porte
y hasta una pata renga.

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De Rengo viene cantando

De Rengo viene cantando
por Carremu, poeta popular de Santiago (Dedicada al poeta C. Castillo, de Rengo

GLOSA:

De Rengo viene cantando
el gran poeta Castillo
y yo soy de Cerrillos
lo quiero ir felicicitando;
desde aquí vamos mirando
con gran respeto y cariño,
porque le canta al vecino,
al niño, mujer y anciano
y a nadie deja de mano
cantando a los campesinos.

Yo se lo digo con tino
al compañero poeta
su pueblo ya lo respeta
porque ha sentido su trino;
y por el mismo camino
seguiremos avanzando,
en nuestra Lira versiando
vamos buscando progreso,
necesario es para eso
seguir a EL SIGLO ayudando.

También le quiero dejar
constancia que estoy feliz,
porque ha nacido de ahí
un gran poeta popular;
en versos va a denunciar
la maldad de los fulanos
que no detienen la mano
para explotar al obrero
y asi sufre, compañero,
trabajando de temprano.

Ahora, en este momento,
quisiera yo aprovechar
para saludos mandar
a campesinos de Rengo;
eso es todo y me detengo,
pero, moviendo un tornillo,
veo al poeta Castillo,
cantándole a los renguinos
y yo le digo: “vecino,
soy de Santiago y Cerrillos”.

DESPEDIDA

Aquí voy a terminar,
mi querido compañero,
y con mucho gusto espero
de nuevo verlo payar;
en la LIRA POPULAR,
por ser ella muy querida,
luchadora y aguerrida,
con pasión y con esmero
junto a EL SIGLO, ¡gran vocero!,
de nuestra patria sufrida.

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Neruda, insigne luchador

Neruda, insigne luchador
Por Pedro González, poeta popular de Rancagua.

Cincuenta años ha cumplido,
el insigne luchador,
y ha vivido con amor
el poeta más querido;
las bajezas que ha sufrido
bien las supo soportar,
porque ha sabido guiar
con gran dignidad su paso
sin darlo jamás en falso
como chileno ejemplar.

Honor, gloria conquistó
en el país oriental
con su talento genial
a Chile representó;
desde allá nos transportó
el saludo cariñoso,
de un  pueblo digno y glorioso,
de Paz y de dignidad,
trayendo fraternidad
como patriota amistoso.

No perdono la osadía
que tuvo tan cruel tirano
que desterró a este hermano
por su sana poesía;
su patria siente alegría
por cobijarlo en su seno,
digno patriota chileno,
de Chile merecedor,
que lo aprecia con ardor
como la flor al sereno.

En la patria del obrero
su nombre quedó grabado,
donde fué congratulado
por pacifista sincero;
con aprecio y con esmero
gentilmente fué atendido,
como hermano recibido
porque así se lo merece,
su gloria en el mundo crece
bien lo tiene merecido.

DESPEDIDA

Y nuestra patria al final
lo tendrá en la memoria,
y en páginas de la historia
su gran nombre ha de brillar,
como patriota ejemplar
que luchó con dignidad,
siendo en Chile voluntad
y en esto no cabe duda
que honores para Neruda
hoy van por su lealtad.

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Fantasías para ellas

Fantasías para ellas
por Luis Polanco, poeta popular de Conchalí

Dama en tu pupila de uva
una sonrisa rosada
dame de las llamaradas
de tus ojos una lluvia;
y en tu pestañita  rubia
la sed para mi quimera,
tus labios de rosa perla
dame en el alba que viene,
dame del jardín que tienes
aromas de primavera.

De suspiros y siemprevivas
yo te haré cintas pal pelo
te haré blusas y pañuelos
en rayos de sol tejidas;
y de las aguas dormidas
en marco de oro y estrellas
te haré la luna más bella
del espejo en que te mires,
combinación de jazmines
de clavelinas, polleras.

En tus labios entreabiertos
dame un poquito de miel
y a mi amargura de hiel
dale el dulzor de tu aliento;
y dame en un pensamiento
las caricias de tus ojos,
y en un clavelito rojo
el rubor de una promesa,
y en tu fuente de ternezas
de ilusiones un manojo.

De los suspiros del agua
con reflejos tornasol
yo te daré un quitasol
y encajes para la enagua;
te haré de rosa y de malva
un primoroso sostén,1
en manos de amanecer
te daré aurora y armiño
y te daré en mi cariño
las canciones del verjel.

DESPEDIDA:

Entre tu alma y la mía
de ópalos haré un camino,
de espigas, cereza y vino
te cantaré melodías;
en cordajes de alegría
te mandaré despertar,
y de topacio y cristal
para tu amor haré cuna,
de violetas y de luna
te tejeré un madrigal.

1  Errata del impreso, esta línea aparece dos veces.

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Lo que sucede allá y acá

Lo que sucede allá y acá
por C. Rebolledo, poeta popular de Santiago

En las Nuevas Democracias
se acabó la cesantía
florecen mejores días
porque murió la falacia;
se desterró la desgracia
del pueblo trabajador
allá no hay explotador
que son la causa ‘e los males
tampoco quedan chacales
y castigan al traidor.

En los países burgueses
la desgracia es pal obrero,
estrujan al pueblo entero
los pulpos más se enriquecen;
y los pobres se empobrecen
trabajando noche y día,
de pago la cesantía
reciben del encumbrado,
se olvidan que allí han llegado
por las manos desvalidas.

Las Democracias de allá
avanzan hacia adelante,
van con paso de gigante
educando a la gallá;
todavía mucho más
no hay hambre ni represión
allá no queda un bribón
que maltrate algún obrero,
hoy todos con mucho esmero
defienden a su nación.

Acá todo lo contrario
los pueblos son oprimidos,
estamos muy desnutridos
nuestra vida es un calvario;
pues el rico millonario
es pillo y es hambreador
y un tremendo explotador
que martirio da al obrero,
cuando éste pide puchero
lo acusan de agitador.

DESPEDIDA

Por último todos saben
que allá murió la mentira,
acá crece con más ira
pero ya poquitos caen;
aunque más mentiras traen
ya es difícil engañar
y naide quiere esperar
ni creer más a los chingues,
más vale que se arrelinguen
y se manden a cambiar.

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Lo cómico en el Plan económico

Lo cómico en el Plan económico
por Alejandro, poeta popular de Santiago

Estoy tan encalillao
que ya no encuentro qué hacer
y ya tengo a mi mujer
con lo puro encapellao;
al sastre por desgraciao
la letra no le pagué
aunque me venga después
con la letra protestá;
no le pago ni una ná
pa ver lo que me va a hacer1.

Vino el dueño’ el conventillo
pa que le pagara el mes,
yo le dije: pa después
porque está enfermo un chiquillo;
se enojó y que yo era un pillo,
que me juera más mejor…
Güeno, que aquí está lo pior,
¿creen que voy a vivir2
como un pájaro cantor…?

Mi mujer una velita
le ha ofertado a Santa Rosa
si encontramos una choza
que sea bien rebonita;
pero quizás la santita
la quiera ahora escuchar
si se ha podido informar
que ya debe algunas velas
a San Pedro, a Santa Adela,
a San Roque y a San Juan.

El dueño del almacén
y el dueño de la cantina
me meten media bolina
si por cazuela me ven;
yo les digo: van a ver
cuando llegue la platita
que viene de tapaíta;
a todos hei de pagar,
pero tienen que esperar
el Plan Anti-inflacionista…

Ahora voy a sacar
las cuentas de lo que debo:
cuarenta velas de sebo
que a santos hay que pagar;
mil pesos ha de tocar
el dueño del conventillo
y seiciento el sastrecillo
más dos mil el almacén,
al cantinero también
quinientos por el blanquillo.

También tengo que anotar
los pesos en otra lista
que el Plan Anti-inflacionista
a mí me tiene que dar;
yo gano al mes en total
de tres a cuatro mil pesos;
si dan quinientos por eso
¿pa qué me van a alcanzar?
¡A ni uno le hei de pagar
pa que no sean tan lesos!

1  Errata del impreso, la línea aparece repetida.
2  Falta línea en el impreso

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A un gran patriota

A un gran patriota
por Azucena Roja, poetisa popular de Santiago.

Hoy mi verso popular
lo dedico con amor,
al que fué todo valor
y combatiente ejemplar.
Con esto yo quiero honrar
de Fonseca su memoria,
y esta acción recordatoria
del gran líder nacional,
es una luz celestial
que nos trae honor y gloria.

No puede causar olvido
la pérdida irreparable
del que fuera irremplazable
timonel de su Partido,
camarada tan querido,
todo un ejemplo de amor,
incansable luchador
por el bien del proletario
modesto y humanitario
ejemplo de gran valor.

Ricardo Fonseca vive;
vive en cada corazón.
Palpamos con emoción
cómo nuestra alma recibe
el mensaje que describe
esa ruta que nos guía
el camino que el quería,
como una senda de flores,
para aliviar los rigores
de la fiera burguesía.

Vivimos para marchar
por la ruta de su ejemplo
consagremos pues un templo
donde él siempre deba estar.
Vivamos para luchar
en la forma decidida,
con que él entregó su vida
para aliviar el calvario
del humilde proletario
que tuvo su fé perdida.

DESPEDIDA

Ya debo finalizar,
cuando quería seguir,
para poder yo decir
mucho más de mi pensar.
Hasta aquí voy a dejar
lo que abarcó mi expresión
dictado con emoción
al recordar al patriota
que dió la más alta nota
con su noble corazón.

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Cantando por puro gusto

Cantando por puro gusto
por Don Juan del Valle

(Al poeta campesino)

A ti, poeta del campo,
que sabes de sufrimientos
y que has oído contento
de un zorzal el dulce canto,
que sabes de los encantos
de septembrinos albores
en que un chamanto de flores
visten todas las praderas,
deja que por vez primera
yo le cante a tus amores.

(Tu china)

Sobre un pedazo de cielo
brillando las Tres Marías
y tú a la china quería
le canturriai tus anhelos;
mientras lloran desconsuelo
las notas de un guitarrón
y te late el corazón
cuando la vez tan relinda,
con su boquita de guinda,
con su carita de flor.

Cubre un pañuelo de seda
su pelo negro y rizado
donde el viento entusiasmado
juega a veces y lo enreda;
pañuelo hermoso de seda
como su cuerpo que anida
una honrada y noble vida
donde bulle una ilusión,
donde pide un corazón
unirse con otra vida.

(Tu guitarra)

Le dice a tu linda china
que ella es tesoro preciado
cuando gime el entorchado
o cuando llora la prima;
su voz es ave que trina
sobre el maitén tempranera,
que te acompaña a cantar
es ella la compañera
al fresco y verde alfalfar,
y al corral y a la tranquera.

(Tu caballo y tu perro)

Con ellos voy por los campos
saboreando algún pesar
o entonando algún cantar
pa olvidar algún quebranto;
han tenido como manto
también el cielo estrellado
cuando por ái acampao
debes quedar cuando vas
de algún animal detrás
que a otro lugar ha rumbiao.

DESPEDIDA

Por fin, termino, poeta,
tú que encuentras impresión
al cortar de tu podón,
al crujir de la carreta;
y al llevar entre la horqueta
el monte pa’l corralón,
yo quisiera tu perdón
si muy bien no resultaron
estos versos que brotaron
del fondo’ e mi corazón.

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No queremos cañones

No queremos cañones
por Pedro González, poeta popular de Rancagua .

A mi modo de pensar
y no estoy equivocado
que de nuevo se ha empezado
contra el pueblo a maquinar;
nos han quitado hasta el pan
mas no veo las razones
sacando las conclusiones
de nuestro duro vivir
muy claro voy a decir
dennos pan y no cañones.

Que ganamos con decir
¨en Chile tenemos leyes¨
si hasta los mesmitos bueyes
ya no pueden resistir;
ya no se puede vivir
con esta vida tan dura
al comienzo se nos jura
arreglar esta situación
y en cambio dan represión
y hablan de la dictadura.

Quieren militarizarnos
en vez de darnos trabajo
y si en esto no hay atajo
algo raro va a pasar
el pueblo se va a cabriar
porque el hambre ya lo apura
el quebranto y desventura
y su vivir desnutrido
lo tienen ya enloquecido
y aun le dan más amarguras.

A quién vamo’ a defender
de quién se espera traición:
cuando aquí en nuestra Nación
ya no queda qué comer
mas yo creo es menester
que nos den explicaciones
den trabajo y más razones
y se guarden los fusiles :
¡na con guerras quiere Chile!
lo gritan los corazones.

DESPEDIDA:

Y por fin hasta a los viejos
con sesenta años encima
también se les aproxima
el cargar el aparejo;
pero esto no irá muy lejos
y la tendrán que cortar
porque deben respetar
al hijo de la Nación
que no quiere represión
y odia al Pacto Militar.

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