Recordando a Recabarren

Recordando a Recabarren
por Luis Polanco, de Conchalí.

El nombre de Recabarren
entrega a la clase obrera
recuerdo de mil banderas
en el desierto y la calle;
es muy difícil que se halle
un hombre de más firmeza
pa defender con nobleza
a los pobres y a la patria
por eso es que se dilata
imborrable su grandeza.

Yo le vi por vez primera
y fué la ocasión un paro
del personal de tranviarios
contra el hambre y la miseria;
esto fué en la primavera
de mil novecientos nueve
enseñando como puede
a clase obrera a vencer
si para poder comer
a pedir algo se atreve.

Más tarde le vi en la pampa
con libros y su bandera
y es allí en la salitrera
donde el hombre se agiganta;
trás él el pampino canta
la fe que se va adentrando
mientras él va predicando
su credo de redención
y dejando en la canción
la esperanza palpitando.

La cárcel de Tocopilla
me dió el informe mejor
del fiel permanente amor
que el sembró con su semilla;
en conversación sencilla
cuando lo fuí a visitar
me dijo para explicar
la ausencia del vigilante:
“lo obligan a estar distante
temen se vaya a infectar”.

Lo que allí había pasado
él me lo explicó sonriendo:
“por ahí se anda diciendo
que yo los he federado
por eso es que me han dejado
sin guardias en la prisión
y tal vez tengan razón
de proceder de ese modo
los hice inscribir a todos
en nuestra federación”.

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Libre serás

Libre serás
por Otin Eberdlav de Talcahuano

GLOSA

Las Fiestas Patrias de antaño
eran de gran alborozo,
en el que el pueblo en su gozo
se divertía a su amaño;
bajo el tricolor de paño
que con su estrella engalana,
gran expansión ciudadana,
mas hoy no hay alegría
y todo es melancolía…
¡qué dieciocho ni macanas!

¿La razón?, vámosla viendo,
¿es falta de patriotismo?
¡No!, es que el pueblo mismo
que ayer cantaba riendo,
hoy ya está comprendiendo
que es un desaire inaudito,
cantar, bailar, reír a gritos
estando Chile postrado,
si libre fue en el pasado
la libertad hoy es un mito.

Más de tres siglos lucharon
los araucanos bravíos
y en sus libertarios brios
nunca jamás doblegaron:
fue la herencia que legaron
a los criollos patricios
que en 1800 al servicio
de la patria se alistaron,
hasta que la liberaron
con enorme sacrificios.

Hoy en fecha septembrina,
Chile se encuentra en andrajos
sin techo, pan ni trabajo,
y si habla se le conmina;
sólo es intención ladina
¿del Edén copia feliz?
nuestra canción dice así
siendo otra la realidad,
pues en Chile es potestad
lo que ordena Wall Street.

DESPEDIDA

Que se harten los magnates
del dólar y sus sirvientes,
y que en Chile sonrientes
se festinen los magnates;
usan grandes azafates,
mas, adorada patria, espera,
que tu gran Central obrera
marchara en carga cerrada
rescatando inmaculada
nuestra sagrada bandera.

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La poesía chilena

La poesía chilena
por Jose Liguay, poeta popular de Longaví

GLOSA

Desde que Alonso de Ercilla
llegara a tierra chilena,
de poesía está llena
nuestra patria que ahora brilla;
con poetas sin mancilla
que miran de cara al sol
y junto al gran español
que Arauco mostro a la fama,
mi voz ahora proclama
a un noble hijo de Angol.

A Pedro de Oña quisiera
nombrar poeta chileno
y le doy aplauso pleno
aunque español se sintiera;
fue el primero que naciera
en Chile y guarde la historia
su gran nombre envuelto en gloria
para ejemplo venidero:
de un poeta verdadero
hay que ensalzar la memoria.

Y como padre querido
de poetas populares
progenitor de cantares
que en Chile siempre han vivido;
por todos reconocido
y con fama bien ganada,
hay una figura amada
por la paya poderosa
que tuvo con De la Rosa:
el gran Mulato Taguada.

Y ya que tomé el camino
de poetas de la tierra.
esta lista no se cierra
sin mencionar a un nortino;
a un hombre cuyo destino
lo debía de juntar
con el que nos iba a dar
de rendiciones el grito:
por Abraham Jesús Brito
aquí vengo yo a cantar.

Y siguiendo en el recuento
de nuestro grandes poetas
sin fijar lindes ni metas
podrían pasar de cientos;
pero mi humilde comento
nunca así terminaría;
Cruchaga Santa María
sí que merece una loa,
y junto a Carlos Pezoa,
Jorge González Bastías.

Y no podría dejar,
antes que mi lira calle,
de dar a Juvencio Valle
su puesto en este cantar;
él lo ha sabido ganar
con su hondura y emoción
con su tranquila pasión,
con su silencio sencillo
con verso que luce el brillo
de una diáfana canción .

Todos son grandes señores
de las letras nacionales;
todos con títulos tales
merecen nuestro honor
y ellos mismos, servidores
de las glorias nacional,
se ponen de pedestal
para colocar xxx1
en lo más alto a Neruda
junto a Gabriela Mistral.

1  Ilegible en el impreso.

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Cómo sufren los mineros del carbón

Cómo sufren los mineros del carbón
Por Jorge, Obrero del Carbón, poeta popular de Coronel

Niños, mujeres, obreros,
de esta localidad
van a saber la verdad
cómo trabaja el minero;
padecen turnos enteros
y muchas veces mojados,
por los cortes arrastrados
como el mísero ratón
detrás la veta ‘el carbón
y bajo el mar sepultados.

Es amargo este escenario
de sacrificio y rigor
su balance es el dolor
de heridos y muertos varios;
para gozar su salario
miedo al peligro no tienen
no hay voluntad que refrene
de morir como esforzado
por un Chile idolatrado
aunque paguen con desdenes.

Expuestos a cada paso
del grisú carbonizados
en derrumbes aplastados
y en corrida hechos pedazos;
la muerte con su zarpazo
es fatal y traicionera
produce a la zona entera
el dolor más grande y fiero
ver la suerte del minero
que es gloria en la patria entera.

Como en Lota y Coronel
Lirquén u otro mineral
hay tragedia nacional
de la manera más cruel;
esto es proceder infiel
calvario de los de abajo
deben poner un atajo
pá que acaben los abusos
y no hayan ya más contusos
ni muertos en el trabajo.

DESPEDIDA

Por eso a escribir me afano
en verso nuestro destino
ya que en nosotros convino
de ser pobres, pero humanos;
yo que soy un buen cristiano
interpreto los ideales
y digo estos son los males
que azotan con honda pena
a nuestra nación chilena
del fondo ‘e sus minerales.

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Canto a las 4 estaciones

Canto a las 4 estaciones
por Luis Polanco, poeta popular de Conchalí.

GLOSA

Le canto a la Primavera
y a su traje de colores
y al tapizado de flores
con que adorna la pradera;
a la bella jardinera
y al anciano regador
que van poniendo en la flor
sus afanes con cariño
y a los picaflores niños
de plumaje tornasol.

Con amor canto al Verano
y al sol que clarea el río
y al trigal que ha revestido
de oro granado ese llano;
con amor canto a las manos
que empuñaron la mancera
y al que por la carretera
a la era lleva el trigo
y al peón que lleva consigo
el agua por la reguera.

Canto a Otoño y su destino
de desnudar la alameda,
y al remolino que eleva
las hojas de los caminos;
al viento que envuelve trinos
en los pálidos alcores,
a los últimos fulgores
de ardiente sol en el prado
y a los murientes sembrados
de amarillentos colores.

Canto al Invierno y sus fiestas
y a los ponchos de Castilla,
y a las dulces lagrimillas
que las tinajas revientan;
a los chascarros que cuentan
junto al fogón los abuelos,
a los frisados pañuelos
que envuelven a las mozuelas,
a las vibranes vihuelas
y a la harina hecha “pigüelos”

DESPEDIDA

Por la tortilla y el queso,
por el mate y el brasero,
lluvioso, Invierno te quiero
y te hago el último verso;
porque en el río travieso
vacias tu canto en la vega,
porque por vos se congrega
la familia en el hogar
y porque en tu terminar
nos das otra Primavera.

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Lo que vi en Ranguel

Lo que vi en Ranguel
por Jorge Obrero del Carbón, poeta popular de Coronel.

GLOSA

Si un tiempo yo me perdí
de mi pueblo, Coronel,
es que anduve por Ranguel
y ahora cuento lo que ví;
allá forastero fui,
pero no a regalonear,
fui de hecho a cooperar
al hermano cqampesino
y a conocer su destino
como lo voy a explicar.

“Salgo al campo a divertirme”
se dice en cueca y canción,
pero no encuentro razón,
luego voy a referirme;
hallé los huasos muy firmes
trabajando con amor,
no le temen al rigor
esté el tiempo bueno o malo,
son como árbol de buen palo
sin sentir frío o calor.

Allá conocí el lagar,
como las tinas y cubas
y ayudando a cortar uvas
y también a canastear;
vi la forma ‘e zarandear
que parece entretención;
pero hablando con razón
el trabajo es muy pesado,
aunque están acostumbrados
transpiran una porción.

También presencié otra cosa
con oirlos conversar,
nada pueden informar
de lo que el ricacho goza;
llevan vidas desastrosas
sin ver diarios ni libritos,
trabajan a lo infinito
y esto mucho me apenó,
sufren lo he visto yo,
los hombres en el campito.

DESPEDIDA

Al fin, si en esta versión
no alcancé todo a explicar,
en cambio, diré al hablar
que lo haré en otra ocasión;
donde estuve es sucesión
con pequeños propietarios
que apenas tienen pal diario
ponerse a considerar
que tienen que trabajar
como cualquier operario.

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El círculo infernal

El círculo infernal
Por C. Castillo, poeta popular de Rengo
(Delirios en el hospital)

CUARTETA DE ADVERTENCIA

¿Los personajes? ¡Paciencia!
pues me encontraba dormido,
entonces cualquier parecido
no es más que coincidencia.

GLOSA

La fiebre me consumía,
todas las camas giraban
y los santos me bailaban
una cueca muy movida;
la sala se oscurecía
en la penumbra espectral,
para colmo de mi mal
me bajó una pesadilla,
soñando por las canillas
con un círculo infernal.

En edificio sombrío,
el chasquido de la guasca
formaban gran alharaca
unos bichos mal paridos;
¡aún me dan escalofríos
recordando esa ocasión!
yo los vi con precisión,
el círculo que formaban
y el edificio en que estaban
se llama Club de la Unión.

Un sapo muy re guatón
con traje de padrecito,
plantó unos tremendos gritos
en lenguaje pelucón:
reclamaba este bribón
blandiendo una cachiporra
que metieran en mazmorras
a todos los proletarios
y después de este rosario
el hombre se fue a la porra.

Llegó volando una bruja
fallona de la mollera,
se creía relojera
¡hay que ver la vieja intrusa!
entonó una semifusa
de corte justicialista
y en medio de la pista
rindióle culto a … Nerón
y después de esta oración
¡zas! que se perdió de vista.

La canción del perseguido
cantó otro bicho al momento,
lanzando un largo lamento,
al del burro parecido;
luego dijo el presumido
“yo soy el gran Galvarino”
¡las cosas que hace el destino!
el indio perdió sus manos,
por valiente y espartano,
lució cuatro este cretino.

Un señor entonces vino
a ocupar el redondel
¡orgulloso el tipo aquel!
exhibió unos pergaminos
de su abuelo, su padrino,
de su estirpe yo le hablo
metió un bochinche macabro
discursiando de lo lindo
de pronto se fue pal limbo
y al descanso de los diablos.

Trabajó luego un payaso
¡chitas que lo hallé pesado!
se reía el desgraciado
repartiendo los abrazos;
vi exhibir los salivazos
tipo Primero de Mayo
con su voz de papagallo
recitaba “La Maldita”
“Pisagua”, “La Margarita”
hasta que lo partió un rayo.

DESPEDIDA

Finalmente la función
y el círculo terminó
y en masa se prosternó
a la guasca del patrón;
el hombre era formalón
llamábanle “Badulaque”
le hicieron tremenda xxlaque
y repartió unos denarios,
se me borró el escenario
y desperté del achaque.

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Una carta al poeta Neruda

Una carta al poeta Neruda
Por Juan II Placencia, poeta popular de Coronel

GLOSA

Para don Pablo Neruda
poeta del continente
envío esta carta urgente
donde mis saludos van;
sé que muchos dirán
que es mejor que no me meta,
¡lo hago, pues soy poeta!
lo saludo a última hora
aunque diga Doña Flora
que di vuelta la chaqueta.

“Le contaré, don Pablito,
aunque usted anduvo en el confín,
que un tal Valdés Larraín
tiene un carácter huraño;
le ha puesto de edad de 8 años
con ese burgués cinismo,
rezumando pesimismo
por el rendido homenaje,
dijo que “era un chantaje”
del cuco del comunismo.

Si todo esto lo mereces
aunque se rompan el mate,
porque eres el mejor vate
y orgullo del continente;
eres gran mago potente
que siembras tú con porfía,
das gran luz en nuestros días
como lumbrera del mundo
sin desmayar un segundo
con tu hermosa poesía.

Tú que ganaste gran premio
porque eres muy capaz,
porque cantas a la paz
desde uno a otro confín;
ostentas premio Stalin
el que fué gran visionario,
y eres vate proletario,
naciste para poeta
tú no piensas en la dieta
como otro ruin y falsario.

DESPEDIDA

Por fin, he rendido honores
porque soy buen pacifista
y al luchar soy optimista
vayan sabiendo señores;
mereces ramos de flores
de toda la humanidad
porque cantas la verdad
con tu enorme corazón,
como poeta del carbón
te canto con mi ciudad.

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Los impuestos del 3 y 10 por ciento

Los impuestos del 3 y 10 por ciento
Por el Indio Mora, poeta popular de La Frontera

GLOSA

Un nuevo impuesto fatal
ha caído sobre Chile
y los millones por miles
piensan del pueblo sacar;
miseria y hambre a la par
traerá por consecuencia
y nueva, triste experiencia
pagarán consumidores
y aumentarán los dolores
del pobre pueblo a conciencia.

Es tremenda la injusticia
que están en Chile aplicando,
nuevas rentas van sacando
con gran valor e impudicia;
provocan así la asfixia
de la pobre economía,
se le apreta cada día,
con nudo corredizo,
mientras tiene Paraíso
aquí grandes compañías.

Sobre el pueblo se descarga
la ReformaTributaria,
significan alzas varias
con que su vida se amarga;
y su miseria se alarga
sin ver otra perspectiva,
por las malas directivas
que están a Chile sumiendo
en un abismo tremendo
de una pobreza efectiva.

El camino es muy errado,
oscuro, negro e incierto,
sólo carga el pueblo el muerto
como un gran fardo cerrado;
de llevarlo está cansado,
no pagan los poderosos
este impuesto oneroso,
cae sobre Chile entero
y magnates y extranjeros
gozan trato ventajoso.

La miseria se agudiza
a límites increíbles
y se hace escarnio visible
de promesas bien precisas;
una nación bien sumisa
es la pretensión mayor;
aumentando el cruel dolor,
la pobreza y padecer,
¡a mi modo y entender
no lo consiguen, señor!

DESPEDIDA

Por fin, formulo un llamado
a la unidad más estrecha
y que ésta vaya derecha
por buen camino orientado
y que luche el empleado,
campesino, obrero, todos,
y en combate codo a codo
vamos juntos los patriotas,
luchando para ver rota
la miseria y en el lodo.

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Mi protesta

Mi protesta
por Sergio Rueda, poeta popular de San Miguel.

GLOSA

¿Qué te parece, Señor,
lo que pasó en Los Cerrillos?,
protestan hasta chiquillos
y ven esto con dolor;
mancilla, pues, el honor
de nuestro Chile querido
esto también ha encendido
un enorme malestar
por eso hay que juzgar
y aclarar a los metidos.

Cuando viene un pobre hombre
que lo único que ha hecho,
es dejar pueblos deshechos
y muriéndose de hambre;
se moviliza un enjambre
de tipos con mal olor
y lo tratan bien mejor,
pero abusan y ofenden,
dicen calumnias y mienten
cuando viene un escritor.

Son re ignorantes los tipos
y tan faltos de cultura,
que si en inglés dice: “altura”,
se dividen los equipos;
y al traducir les da hipo
y si lo hacen demasiado
habrá que andar con cuidado
pues pueden pillar cobalto
y si se tiran el salto
pueden jugar a los dados.

El pueblo es el que reclama
y los pobres que no comen;
alegre están los panzones
y aquel que la sangre mama;
pues estos tipos no aman
más que el dinero podrido
y al chileno tan sufrido
miran como una basura …;
¡yo prefiero la cultura
y a mi pueblo tan querido!

DESPEDIDA

Terminaré de versiar
a viva voz protestando
y a Chile entero alentando
a que debemos luchar;
para enseñarle a tratar
a las ilustres visitas,
cuando a un chileno se invita
a ir a otra nación
no les ponen condición
ni requisan sus cositas.

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