La coqueta

La coqueta
por Rafael Martínez Navia

No hay flor como la violeta
para el triste enamorado
como es el mayor pecado
dar crédito a una coqueta.

Fascinante, insinuadora,
te colma con su presencia:
tiene la misma elocuencia
del cocodrilo que llora.

Te brinda frescos pensiles,
sus labios destilan mieles
y entre arrullos y claveles
te ofrece delicias miles.

Esa beldad que el martirio
siempre da, y no lo quita,
ciertos días se marchita
y deshoja como el lirio.

La coqueta debe ser
un embrujo de este mundo,
es un misterio profundo;
a lo mejor no es mujer.

Es destemplado violín,
triste barca sin timón,
un cuerpo sin corazón
que todo nada es en fin.

Es un ser que nadie entiende
es algo más que yo no hablo
y que sola se comprende…
¿quién puede ser, sino el Diablo?.

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Un llamado a los poetas y cantores populares

Un llamado a los poetas y cantores populares
por Juan II Placencia, poeta popular de Coronel.

Vuelvo a la zona ‘el carbón
para ponerme de frente
a cantarle a los mineros
como Vicepresidente.

Al asistir a un Congreso,
debo decir la verdad,
sí ese puesto se me dio
fué por unanimidad.

Por fin va a salir a flote
esa magna poesía
que tal vez por un capricho
permanecía escondida.

Yo invito a cualquier obrero
que tenga una cualidad
que escriba aquí en esta Lira
y venga a la Sociedad.

Aquí en la zona minera
hay puetas muy distanciados
vengan todos hacia mí
y serán organizados.

En la Unión de los cantores
le abrimos la puerta a todos
si alguno la hierra un poco
lo arreglamos de algún modo.

Viejos, jóvenes y niñas
que tengan uso ‘e razón
yo invito a todo chileno
venga a nuestra asociación.

La invitación ya está hecha,
va a principiar el concierto
y la Unión de los Poetas
tiene los brazos abiertos.

No tenemos egoísmo
con los puetas ni cantores,
mi idea ya está lanzada
compréndanlo bien, señores.

Y al terminar este verso
lanzo un llamado de frente
como poeta del Carbón
y como Vicepresidente.

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Los cuatro piques

Los cuatro piques
Por Darío Lotino, poeta popular de Lota

Cuatro piques tiene Lota
su dueña es la Compañía
los nombraré en esta nota
y los fundó don Matías.

En cada uno hay un jefe
que los dirige por cierto
espero que a mí me deje
aunque sea en Pique Alberto.

Esto decía un obrero
al que sus datos tomaba
prefiero el turno primero
yo en el campo madrugaba.

Aquí mucho se ha luchado
y hasta ha corrido sangre
me decía un delegado
del famoso Pique Grande.

Lucharemos por la Paz
con gran fe y decisión
hablaba con claridad
un obrero del Chiflón.

Tengo preocupá la mente
y estudiando me lo llevo
reemplarazon mucha gente
máquinas de Piques Nuevos.

Cuando paseo en el Parque
que ‘Oña Isidora fundó
digo igual para el embarque
cuando se mecanizó.

Maniobran pa dividirnos
y se jactan con soltura
los patrones son los mismos
de la Forestal Colcura.

Elogio los Sindicatos
y en éstos se cuadra el nuestro
por la Central me desato
con la Cetal1 me demuestro.

1  Errata del impreso, debiera decir “Central”

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La fraternidad universal

La fraternidad universal
por Máximo Ramírez, poeta popular de Santiago.

Si es una la procedencia
de todo cuanto es creado
como ya muy bien la ciencia
eso lo ha demostrado.

¿Para qué tanto egoísmo?
¿para qué tanta crueldad?
¿no es una sola familia
acaso la humanidad?

Que se extinga la vil guerra
que venga pronto la paz
para vivir cómo hermanos
y no pelear nunca más.

Todos los grandes mentores
faros de la humanidad
nos han dicho que la guerra
es la peor calamidad.

Esa es la ley de las selvas
y de los mares también
pero para el ser pensante
eso no le cuadra bien.

Para el pobre la existencia
muy triste y muy dura es
si le añadimos la guerra
de acíbar la copa es.

Los secretos entregados
por nuestra madre natura
han de ponerse al servicio
de la humana creatura.

Puesta la ciencia al servicio
de humana preservación
se evitaran los flagelos
de la guerra y destrucción.

Cordialmente como hermanos
viva siempre la unidad
que es una sola familia
todita la humanidad.

Los que provocan las guerras
tienen duro el corazón
son caínes y verdugos
sin amor ni compasión.

Si es el hombre razonable
no debiera guerrear mas
unirse sí, como hermanos
y vivir en santa paz.

Todo entonces cambiaría
habría coperación
y el mundo así viviría
en perfecta comunión.

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Ha muerto Bella Esperanza

Ha muerto Bella Esperanza
por Manuel Urbano, poeta popular de Puente Alto

Ha muerto Bella Esperanza
y toda esperanza muere
viviendo en el miserere
de la burguesa templanza.

Templanza para enfocar
la solución del problema
que el pueblo lleva de emblema
miseria y falta de pan.

Templo mi pluma canora
para volver a enjuiciar
el virus vil de este mal
la moral silenciadora.

Silencio del peculado
de la ramera y del judas
y nunca el alma desnuda
del hechor del negociado.

Silencio de la impudicia
del agiotista venal
silencio para juzgar
podredumbre y avaricia.

La baba que todo vicia
la negligencia oficial
ha permitido este mal
por inhumana sevicia.

La Bella Esperanza  ha muerto
y volverá a resurgir
de nuevo para pedir
sin esperanza por cierto.

Y seguirá así el concierto
de las voces destempladas
de los que no obtienen nada
estando el mundo tan lleno.

Yo aconsejo no pedir
y unirnos a la miseria
la podredumbre burguesa
tenemos que combatir.

Debemos de combatir
unidos todo por cierto
requisaremos lo nuestro
con las garras o el fusil.

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Ante el gran triunfo minero

Ante el gran triunfo minero
por Juan II Placencia, poeta popular de Coronel.

Glorioso pueblo minero
tienes nombre de aguerrido,
con la Unidad que tenís
otro triunfo has obtenido.

Eres rey en tus combates
por que eres un proletario
sabes defender tu triunfo
mejorando tus salarios.

Abrazando a la Central,
madre de gran corazón,
se han batido poderosos
los obreros del Carbón.

Eres heroico minero,
no te confundan con buey,
tus pliegos los defendiste
amparados por la ley.

Has demostrado unidad
como el roto más sincero
la huelga se terminó
sin encontrar un carnero.

Se va criando conciencia
en todos los sentimientos
se va siguiendo la línea
que trazara el gran Barrientos.

Avanti pueblo minero
demostraste ser campeón
convénzanse compañeros
que todo lo hace la Unión.

Junto a vuestras compañeras
que siempre han sido constantes
ellas en todo momento
estuvieron vigilantes.

Fue una lucha tesonera
no se vió ningún desorden
porque vuestros dirigentes
supieron guardar el orden.

Muchos actos culturales
se vieron de noche a noche
porque este triunfo obtenido
se cierra con un gran broche.

Año por año se lucha
pues nos dejan a las cuelgas
para conquistar mejoras
por ley hay qu’ir a la huelga.

Se burlan las compañías
por su enorme magnitud
y al año nos dan un premio
que se llama ingratitud.

Por eso nos enfrentamos
luchando dos adversarios
uno por economía
y el otro por su salario.

Y al terminar este verso
con estas letras prudentes
se merecen un aplauso
nuestros bravos dirigentes.

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Don Encarnación y su compadre

Don Encarnación y su compadre
por Marcelina Oviedo, poetisa popular del Maule

Ya no se puede vivir,
mi compadre Encarnación,
no se puede subsistir
¡hay hambre en nuestra nación!

Así es no más, compadrito,
suben y suben los precios
pretenden hacernos necios
pero hay de protestas gritos.

Y además de carestía
hay falta de producción,
si hubiera pa adquisición
tampoco comprar podrían.

Cada año se siembra menos,
esa es la pura verdad,
es crimen más que maldad
no poner en esto freno.

Yo les contaré, compadre,
que este año habrá menos trigo
créame lo que le digo
¡se lo juro por mi madre!

Se lo creo compadrito
y el pan ya más no veremos
si ni esto poder comemos
¿qué haremos pal inviernito?

Lo que tenemos que hacer
toditos los campesinos
es luchar con harto tino
y la unidad comprender.

Y una vez que unidos ‘temos
no tenemos que cejar
sólo grande nos haremos
con tierras pa cultivar.

Eso es compadre querido
Reforma Agraria tendremos
y así abundancia veremos
en nuestro Chile aguerrido.

Todito será barato
y habrá de ello al por mayor
siendo dueño de la tierra
el honrado agricultor.

Y en el campo y la ciudad
laboraremos gozosos
obreros y campesinos
forjando un Chile dichoso

Un Chile con niños sanos
bien vestidos y comidos
donde no queden recuerdos
d’este mundo corrompido.

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El guatón y la flaca

El guatón y la flaca
(Contrapunto)
por Fernando Torres, poeta popular de Curicó.

EL GUATON:

Qué flaca la criatura,
no lo digo por pelar:
si comiera una aceituna
daría que murmurar.

LA FLACA:

Cállate vos guatesapo
con cara de puchimbol,
parecía pelotatrapo
después de meter un gol.

EL GUATÓN:

Con un comerciante en huesos
un negocio voy a hacer:
aunque sea en cinco pesos
le venderé a mi mujer.

LA FLACA:

O querís hacerte el leso
o hablai de pura inorancia:
¿Qué no sabís que en el hueso
es onde está la sustancia?

EL GUATON:

Habla bien el esqueleto,
parece tener razón,
pero no comprometo:
prefiero ser un guatón.

LA FLACA:

Si eso es lo que preferís
yo no te hago discusión,
sólo que así te pondrís
cada día más guatón.

EL GUATON:

Muy de acuerdo, tallerín,
no hagamos más discusión,
que mi flaca sos al fin
como yo soy tu guatón

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Creía en ti

Creía en ti
por Manuel Urbano R., poeta popular de Puente Alto.

Fallar cien y triunfar una
si no es bueno no es lo pior,
pero el caso es que ninguna
vide queriéndote a vos.

No te pedí amor sensual,
que me tiene atosigao,
toy pareciendo animal
tanto tiempo que ando alzao.

Ponerlo freno a ese mal,
pretendí al fijarme en vos,
pero ese freno, mi amor,
vos mesma lo habís de usar.

Tu segunda juventud
es ardiente y peligrosa,
yo no busco la inquietud
y con vos va mal la cosa.

Te escribí versos sentidos,
no supiste comprender,
tienes escaso entender
y por eso te has hundido.

Te expuse yo mi intención
con franca sinceridá,
halagué tu vanidad,
no ablandé tu corazón.

¿Sabes algo de humildá?
¿Conoces puro el amor?
¿Sabes lo qué es lealtá,
o eres flor de perdición?

Ningún trofeo logré
con haberte poseído,
me afanaron los sentíos
y en pior situación quedé.

Creía en ti, te lo juro,
al creer en tu sufrir,
pero se aclaró lo oscuro,
hoy conozco tu mentir.

Soy sincero en el querer,
te lo supe demostrar,
temo que no hei de encontrar
quién lo sepa merecer.

Tampoco mei de arrastrar
por vil y bajo placer,
si sólo voy a lograr
tu vanidad complacer.

Tu decencia al fracasar
es motivo de mi enojo,
es abriendo bien los ojos
que se ejerce la moral.

Adiós te digo, engañosa,
ya se murió mi ilusión,
frívola flor vanidosa,
quedar solito es mejor.

No me explico, pa mi mal
y estoy por eso asombrao
¡un corazón cultivao
no se arrastra al cenegal!

Pretender justificar
el vicio por lo sufrío
no es nunca de señorío,
te lo puedo demostrar.

A mí me sabe inspirar
el dolor que purifica,
y en versos quiero cantar
al amor que dignifica.

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Dio a luz tres hijos

Dio a luz tres hijos
Por René Nobili, poeta popular de Santiago.

Con la vida tan recara
y trae al mundo tres guaguas
¡se pensará esa señora
que las va a criar con agua…!

Y ya que de agua se trata,
no hablemos de agua tampoco,
porque el agua no es barata
alcanzó ya un precio loco.

Mi señora por diosito,
¿qué mosco la habrá picado..
¡tener un hijo hoy es mucho,
tener tres es gran pecado!

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