Otra respuesta a un dueño de fundo
(Por José del Carmen Yáñez, poeta popular de la provincia de Linares)
No se trata de Moscú,
tampoco del Vaticano;
que todos somos hermanos,
así lo dijo Jesús;
o no lo conoces tú
a pesar de ser tan beato;
voy a hacerte aquí un relato
y a dártelo a conocer:
Jesucristo fué aquel
que mandó matar Pilatos.
Jesucristo, el Nazareno,
que un día predicara
que a todo ser se le amara,
fuera malo, fuera bueno;
en cuyo rostro sereno
el amor se reflejara,
que un día crucificaran
los soberbios como tú,
que mienten que de Moscú
nuestra Lira se guiara.
Pero estoy analizando
tu proceder con los peones
y por todas estas razones
tú nos estás engañando,
y beato te estás nombrando
aunque no crees en nada.
y que es una mascarada
aquello de creer en Dios
y sólo el dinero en vos
es esa fe tan nombrada.
Eres un hombre ladino
como todo potentado,
que el nombre ‘e Dios ha tomado
pa engañar al campesino,
diciéndole que el destino
de los ricos es el mandar,
y que si a un pobre le dan
un golpe en una mejilla
debe hincarse de rodillas
y allí otro golpe esperar.
Mas los tiempos han cambiado
y el pueblo va progresando
y muchos están pensando
de que han vivido engañados
y que no hay tal potentados;
lo que hay son explotadores,
y que a todos estos señores
su tiempo ya ha terminado
y el día menos pensado
van a pasar sus calores.
DESPEDIDA
Voy a despedirme, iñor;
le pediré mil perdones
por si acaso mis razones
han ofendido su “honor”,
y hasta le pido un favor:
medite el futre un poquito,
puede cortarse el hilito
si lo estira demasiado,
¡agora el campesinado
conoce algunos libritos!