Así su voz a los cielos
El pobre hermitaño alzó,
Y al oir sus desconsuelos
El Señor le contestó:
—”El mundo se iba a acabar
en un dia mui cercano,
si mi poder soberano
tú no hubieras de invocar
Ahora voi a prolongar
los dias de su existencia,
ya que tú a la Providencia
con humildad le has pedido
que al que no le haya efendido
le perdone su inocencia.
“Tambien serán perdonados
por la bondad de los buenos,
los míseros que están llenos
de crímenes y pecados.
Todos se verán salvados
en la hora de la muerte
y si voi a concederte
esta grande peticion,
lo hago por la oracion
en que yo acabo de verte.
Dos siglos mas durará
el mundo tal como ha sido,
y el que se haya convertido
a mi reimo llegará.
Siempre bendito será
el que respete mi nombre
y por mas que les asombre,
soi el Rei de todo el múndo,
y con mi saber profundo
formé la tierra y el hombre.
“Vé por donde andar pudieres
y estas palabras sagradas
pronto tendrás relatadas
a hombres, niños y mujeres.
Diles que huyan los placeres
si no quieren condenarse,
que es bueno sacrificarse
para llegar a la gloria,
y que no hai mayor victoria
en la muerte que salvarse.”
Esta es, lectores queridos,
la narracion mas sincera,
mas fiel y mas verdadera
de los hechos sucedidos.
Debeis estar convencidos
de que si el pobre hermitaño
dolido de nuestro daño
no ora con dolor profundo,
se habría acabado el mundo
en mucho ménos de un año.
SAN VICENTE FERRER.