Hagame la cama anchita
  Para mi dulce llegada
  La sábana bien planchada
  Y la cabecera altita.

  Mi dueña aunque estoi ausente
En un pais tan distante
Tienes aquí un fiel amante
Que pena y muere por verte,
He prometido el quererte
Mi pasion quien me la quita,
Si a tu corazon le edita
Soy digno en corresponder,
Para gozar del placer
Hagame la cama anchita.

  Yo no gozo diversion
Mis tormentos son muy graves
Solo Dios no mas lo sabe
Lo que sufre mi corazon.
Todos mis deseos son
Estar cerca de mi amada,
Voy hacer esta jornada
En tan penoso retiro
Por señas mando un suspiro
Para mi dulce llegada,

  No creas que por mi ausencia
Yo te haiga echado en olvido
He de hacer mil poderio
Por volver a tu presencia.
Si tú obras con prudencia
Reposaré en tu morada
Si mi dilacion te enfada
Hablo como necesito
Para saciar mi apetito,
La sábana bien planchada.

  Desperté una vez, dormido
Muy trise y acongojado
Con el corazon dañado
Y en lagrimas sumerjido
Yo toda la culpa he sido
Que padezca mi negrita
Vengo ahora de visita
A unir vuestros corazones,
En dos lindos almohadones
Y la cabecera altita.

  Al fin, tu amante rendido
Viene a pedirte perdon
Muévete de compacion
Auque tanto te ha ofendido,
Tu amor aqui me ha traido
A ver mi preciosa palma,
La pena y dolor no calma
De haberte hecho padecer.
Pero ahora hemos de ser
Dos corazones y una alma.

       Ignacio Salazar.

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     Se acabó la dictadura
  Murieron los sin conciencia
  Pueden tener esperiencia
  Hay gusto que poco dura

  Adonde están los galones
Que Balmaceda les puso,
Adquirido con abuso
Sinvergüenza, fanfarrones.
A todos estos bribones
Los pusiese en apretura
Por infame y sin cordura
Siempre han de estar en la lista
Ahora no hay gobiernistas
Se acabó la dictadura.

  Les duele su corazon
Porque el deber los obliga,
Varios porque no se diga
Aplauden la oposicion,
Toda su mala pasion
Se les cambió en apariencia
Dios con su alta providencia
Y su divina justicia
No hay soberbia, ni avaricia
Murieron los sin conciencia.

  Los que formaban asunto
Contra de la oposicion
Demen la contestacion
De lo que yo les pregunto.
Quisiera que todos junto
Tuviesen en mi presencia,
A ver si obran con prudencia
O siguen endemoniado,
Por los que les ha pasado
Pueden tener esperiencia.

  Si he cometido algún guerro
Pueden reprocharme el verso,
Ahí está el pícaro perverso
Que se llama Pio Fierro,
Que tiene entrañas de perro
Asi como es su figura,
Lo pide la sepultura
Y estos tendrán en memoria
De tanto placer y gloria
Hay gusto que poco dura.
  Al fin, digo ciudadano
Que miren lo de adelante,
Tratar bien al semejante
No es bueno ser tan tirano,
El que azotaba cristianos
Un premio ha de recibir
Espera ese porvenir
Que le llegue cualquier dia
Con la vara que media
A él lo van a medir,

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     Hemos de aplaudir señores
  El triunfo que está a la vista
  Que mueran los gobiernistas
  Vivan los opositores.

  Con júbilo, paz y union
Vivan todos los valientes,
Que han puesto su pecho al fren
Hasta vencer la cuestion          (te
Vivan aquellos que son
Héroes libertadores,
Castigaron los errores
Del imbécil criminal,
Un combate tan legal
Hemos de aplaudir señores.

  Ocho meses ha durado
El capricho del tirano,
Conociendo que era en vano
Tarde se ha desengañado.
La sangre que ha derramado
Ha sido ruina imprevista,
No hay nadie que resista
De reprocharle su falta
Y alabando en voces alta
El triunfo que está a la vista.

  No tengo el menor cuidado
Para dar estos detalles,
Hoy ya se vén por las calles
Traficar a los honrados.
Un largo tiempo han gozado
Bandidos de su conquista,
Con la pasion egoista
Urjían a todo el pueblo,
Para vivir en arreglo
Que mueran los gobiernistas!

  Cuando la caballeria
Entró al pasaje Santiago
Sin hacer ningún estrago
¡Que glorioso fué ese dia.
Calmados de la alegria
Y los labios moradores!
Los pobres y superiores
Deciamos con coraje
Que se acabe el bandalaje
Vivan los opositores!

  Al fin, digo caballero
Lo que es mas equivalente,
Tenemos un intendente
Querido del pueblo entero.
No como ese bandolero
Dictador come cristiano,
Hizo pelear los hermanos
Con su soberbia y engaño,
Viva por un siglo de años
Don Eulojio Altamirano.

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  En Concon primeramente
Fué la primera guerrilla,
En seguida en la Placilla
Triunfó Canto el valiente.

  En el puerto de Quintero
Desembarcaron las tropas,
Ha resonado en la Europa
El valor de los guerreros.
En el combate primero
Fallaron los delincuentes
Aunque el rio y sus corrientes
Les servia de embarazo,
Balmaceda perdió un brazo
En Concon primeramente.

  Se sabe que los soldados
Pasaron con el agua al cuello;
Y por el arrojo de ellos
Varios murieron ahogados.
El triunfo les ha costado
Derrotar la pacotilla,
La oposicion no se humilla
Ni se rinde en ningún trecho,
Para los nuestros provecho
Fué la primera guerrilla.

  Trataron de allí salir
Viendo tan serio el asunto,
Y dirijiendo otro punto
De poderse combatir.
Cuando ya se oyó decir
Salió la infernal cuadrilla
De toda la palomilla,
Son pocos los que libraron
De nuevo los arreglaron
En seguida en la Placilla.

  Cuando dió principio el fuego
El pueblo en gran entusiasmo
Y no creian que el pasmo
Que se atajase tan luego,
Echando dos mil reniego
Todo lo perteneciente,
Aliados del presidente
El que nos labró la ruina,
Por su buena disciplina
Triunfó Canto el valiente.

  Al fin, señor Baquedano
No es comprometido en nada,
No quizo manchar la espada
Con sangre de sus hermanos.
Conociendo el loco insano
Que por él es la ruindad,
Sabe con seguridad
Que vá a caer al infierno,
Y lo dejó de gobierno
Que entregase la ciudad.

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