EL ITALIANO
Que se mató de tres balazos

  Un inmigrante italiano
Tres balazos se tiró.
Por causa de una mujer
Se dice que se mató.

  En el callejon de Elías
Fué la escena que conmueve
Y en el número del nueve
Era donde este vivia
Su pension allí tenia
Dondo llegaba temprano
Viendo ya su fin cercano
Hizo atropello inaudito
Cometiendo este delito
Un inmigrante italiano

  Cárlos Fontané se llama
El que la muerto se ha dado
Estando desesperado
Acostado en una cama
Cuentan que por una dama
El revolver lo cojió
Y luego se disparó
Un proyectil en seguida
Para acabar con su vida
Tres balazos se tiró.

  Virjinia Sotomayor
Dueña de casa en razon
Fué reducida a prision
Ella con su hija menor
Por cierto causó terror
Este suceso a mi ver
No se puede comprender
Como el hecho ha sucedido
Se dice que ha sucumbido
Por causa de una mujer.

  Al hospital fué llevado
En el momento despues
Con su completa embriaguez
Y su cuerpo ensangrentado
Mui luego fue examinado
Y el médico constató
Que sus heridas ya no
Tendria pues curacion
En la mas grande afliccion
Se dice que se ultimó.

  Al fin les diré señores
Que de paises estraños
So ha visto de año en año
Cometer tantos horrores
Por causa de los licores
De que aquí vengo a esplicar
Y se van a suicidar
Como aquí se los relato
Dicen ellos si me mato
Para siempre he de descanzar.

Ver lira completa

LA MUJER CUENTISTA

  De contínuo se verá
A la mujer habladora,
Visitando de hora en hora
Por toda la vecindad.

  Con el fin de zorzalear
Los mates a la vecina,
Le acomoda una bolina
I allí la empieza a contar;
La contesta le va a dar
A la que ofendida está,
Presto se vá más allá
A ejecutar su pelambre,
Llevando y trayendo enjambre
De contínuo se verá.

  Así sucedió tambien
En calle Patricio Linche,
Fué victima de un bochinche
Una señora de bien;
Aunque crédito no dén
A la mujer peladora
Su lengua murmuradora
Se ocupa del testimonio,
I mucho azuza el demonio
A la mujer habladora.

  Cuando la hora tantea
De los mui sabrosos mates
Contando sus disparates
A las vecinas recrea;
Entónces se contornea
I empieza como una lora
A contar lo de la Flora
O de otra pobre mejer
I siempre se le ha de ver
Visitando de hora en hora.

  A la hora de la comida
Ya la mujer se prepara
I vá a formar algazara
Donde una amiga querida
Con la vergüenza perdida,
I con toda su maldad
Deja en la calamidad
A una familia entera,
I se vé mui placentera
Por toda la vecindad.

  Al fin, nunca tiene paz
Porque su oficio es pelar,
I a todos los pone mal
Por obra de Satanás;
Pero no calla jamás
La mujer astuta y loca,
I rasguña al que la toca…
Díganme si no es así,
¡Que hallan mujeres aquí
De tan admirable boca!.

       A. REYES

Ver lira completa

REMEDIO EFICAZ
PARA CASTIGAR A LA MUJER CELOSA

  A cualquier hombre casado
Esta receta le viene,
I buen resultado tiene
Usándola con cuidado.

  Si la mujer es celosa
No hai remedio mejor,
Que tratarla con rigor
Por porfiada y caprichosa.
Se hace fiel y hacendosa,
Cuando esto has ejecutado.
I con un lazo doblado,
Dadle una zumba bien fuerte,
Le recomiendo esta suerte
A cualquier hombre casado.

  Si siempre sigue con celo
Riñéndote con afan,
Arremángale el fustan
I pégale allí en el suelo.
Aunque ella se queje al Cielo
Castigarla te conviene,
Aunque te cante y no llene:
Al marido doi consejo
Sea jóven, sea viejo
Esta receta le viene.

  Si te sigue a donde vás
Aguaitándote tus pasos
Afirmale un garrotazo
No lo volverá a hacer más.
Muéstratele bien tenaz
I luego la reconvienes,
Si en esto tu te detienes
No llegarás a la veta.…
Provechosa es la receta
I buen resultado tiene.

  Si comienza con querella
I te cela a cada instante,
Busca lueguito el calmante
I dále guasca con ella.
Aunque esté que no resuella
No quedará en mal estado,
El remedio no es privado;
Al contrario, es eficaz,
I un gran éxito obtenarás
Usándolo con cuidado.

  Por último, la mujer
Mui luego se hará sumisa,
I cuando ella vaya a misa
Gran cuidado has de tener.
Me tendrás que agradecer
La receta y el remedio:
Aunque esto te cause tédio
Tú siempre lo habrás de hacer…
Por tan noble proceder
Yo no me gano ni medio.

Ver lira completa

CARTA
DE LA MADRE DE BALMACEDA

  La madre de Balmaceda
Se acercó al Gobierno augusto
Pidiendo un salvo conducto
Para salir cuando pueda;
No es justo que se conceda
La petición atrevida,
Que por ella no era vida
La que pasaba el tirano,
Aconsejándole en vano
Se afirmára en la caida.

  La viejita mui ufana
Solicitó en el papel.
Le concedieran aquel
Pedido de buena gana;
Como ha sido tan tirana
No merece esa acojida,
Que no tenga la salida
Esa picarona vieja,
I pues que su hijo la deja,
Que se afirme en la caida.

  Ahora pide favor
I ántes estaba orgullosa,
Cuando oía alguna cosa
Se llenaba de furor;
Jamás tenia temor
Estando de muerte herida,
Todo eso no se olvida
Porque se tiene presente,
Cuando decia impaciente
Se afirmára en la caida.

  La dicha carta entregó
A la Junta de Gobierno.
Se le hizo el tiempo eterno
Cuando contesta esperó;
La suerte que le corrió
Todos la tieuen sabida,
No será bien atendida
Por lo mala y caprichosa
Que a su hijo dijo afanosa
Se afirmara en la caida.

  Al fin, viejita malvada
Quién habia de pensar.
Que te ibas a lamentar
Por los rincones botada;
Si te encuentras mal parada,
No digas más por tu vida
Esa palabra atrevida,
Que decías mui de fijo,
Al dirijirte a tu hijo
Se afirmára en la caida.

Ver lira completa

LA MUERTE DE BALMACEDA

  Donde el ministro arjentino
Balmaceda se dió muerte,
Ha sido la triste suerte
De su terrible destino.

  Alarma mui sorprendente
Ha sido dicha noticia
I no pudo la Justicia
Contener a tanta jente;
La opinión fué diferente
Es lo que yo me imajino,
El desórden sobrevino
En este pueblo anheloso,
Porque se iba mui ancioso
Donde el ministro arjentino.

  A las ocho en la mañana
Se sintió, ¡qué confusion!
Una gran detonacion
En esa hora temprana
I las casas mas cercanas
Dicen que ha sido mui fuerte:
El hecho de horror se advierte
Es en calle de Agustinas,
De manera repentina
Balmaceda se dió muerte.

  Don Cárlos Walker Martinez
En ese instante llegó
Con el señor Barceló
En apurados trajines
Allí estudiaron sus fines
Del hombre que se dió muerte
I al conducirlo ya inerte
En ese momento sério
Camino del cementerio
Ha sido la triste suerte.

  Tomó un revólver en mano
Balmaceda al levantarse
Para poder ultimarse
I dejar de ser mundano.
Su sentido boeno y sano
Tenia según yo opino,
Apuntó en la sien con tino
Muriendo al instante allí,
La suerte convino así
De su terrible destino.

  Al fin, pidió garantía
A la Junta de Gobierno
Quien con cariño mui tierno
Le dijo se las daría
Pero que se juzgaría
Por la justicia ordinaria
I allá en la Penitenciaria
Se le daría la pena
I no aceptándola buena
La muerte halló necesaria.

Ver lira completa

LA NIÑA
que se mató con una botella

  Una niña se mató
de un botellazo, lectores,
i ha causado mil horrores
cuando la escena se vió.
La desgraciada cayó
en mui crueles agonías
i al poner fin a sus dias
escribió una carta larga
de su vida tan amarga
fué la causa i que moria.

  Es el nombre Luisa Viel
la niña que se dió muerte.
En la misma carta advierte
que ella autora fué la cruel.
Dejó dicho en el papel
yo me mato con motivo.
Este papel que yo escribo
sirva testigo al instante
porque yo desesperante
en este mundo ya vivo.

       ADOLFO REYES.

Ver lira completa

LA HUELGA
de los cuadrinos en Valparaiso

  La huelga de los cuadrinos
no poca alarma ha causado:
cincuenta se han separado
por disgusto en los destinos.
La vida de langostinos
quisieron presto pasar
i un grupo se fué a pelear
contra muchos policiales;
siendo en armas desiguales,
se tuvieron que humillar.

  El motivo fué de qué
los habian separados
a unos cuantos empleados
por un robo, les diré,
pero el mayordomo fué
el que notó el movimiento
yendo a avisarle a un sarjento
para que fuese un piquete,
i el diario del dia siete
dió cuenta del alzamiento.

  Del cuadro se dispersaron
formando gran algazara;
i ese dia, quien volteara,
entre algunos no faltaron,
los otros se retiraron
como a las once del dia,
es decir, la policía,
a varios a capturado
i en el cuartel han quedado
por causa de tal porfía.

Ver lira completa

REMEDIO EFICAZ
para castigar a los maridos
celosos

     A toda mujer casada
  les voi a dar un consejo.
  Esta receta que dejo,
  téngase pues bien guardada.

  Si tu marido es celoso
i amigo de calentarte.
tú quieta debes estarte
mientras él se halle furioso.
Si con impetu veleidoso
te deja a tí machacada.
contra esta accion malvada
esta receta daré,
i servirá, como se vé,
a toda mujer casada.

  Cuando tu marido trate
pegarto o si te rasguña,
como puedas, las diez uñas,
entiérrale en el gasnate.
Si le rompieras el mate
era poco o el pellejo
i ademas si acaso es viejo,
ahorcalo i no le tema.
Sobre este nuevo sistema
les voi a dar un consejo.

  Si tú conversas con uno
i con ese a tí te cela,
si es posible con la vela
acomételo al toruno.
Si te carga aquel perruno,
luego te pones en riesgo;
dále fuerte i por parejo
si ya la fuerza recobras,
con razón, mas que de sobra,
esta receta les dejo

  La llegada le tanteas
con la tetera hirviendo.
Si te llega algo diciendo,
al tiro se la baseas;
si es poca cosa, no creas
que ha de chillar por nada.
Tendrás tambien caldeada
una plancha bien caliente
i al tirarse de repente
téngase pues bien guardada.

  Al fin, por si él te malicia
i te quiere reprochar,
busca luego un policial
i llévalo a la justicia.
Dále eso por caricia
te aseguro no lo hará mas
El gran éxito tendrás
si la recota conservas
o la de no, malas yerbas,
te aseguro que verás.

Ver lira completa

LA ULTIMA
sentencia a los reos dictato-
riales

  La Excelentísima Corte
se ocupa ya en los procesos
de todos los que están presos
dictatoriales del norte.
Algunos en un trasporte
esperan con gran clemencia
favorable la sententencia
pero no conseguirán,
i hoi se sabe que están
con la mayor insolencia.

  Stephan, aquel mandon,
de la gobiernista tropa
que le gustaba la copa
a costa de la nacion,
no tendrá la absolucion
por verdugo i gran tirano.
Se deleitaba el ufano
en flajelar los chilenos:
fué cobarde entre los buenos
huyendo al campo cercano.

  Velasquez i Pio Fiero
con otros cómplices mas
los han de llevar quizas
a un penoso destierro
o los tendrán en encierro
por haber sido traidores,
pero hoi los opositores
quieren tenerles piedad;
no es bueno tener bondad
con esos flajeladores

  Luego el público sabrá
la suerte de aquellos reos;
estar libres es el deseo
de los dictatoriales ya.
Hoi nadie conseguirá
la peticion que ellos quieren,
el destierro lo prefieren
por librarse de prisiones.
Javonados esa sayones
se iran si ya no mueren.

  A muchos les pesaran
de haber sido gobiernista
como se tienen en lista
han quedado hasta sin pan;
todos ellos sufriran
porque son los mas tenaces
i nunca fueron capaces
de tanta sangre evitar;
entonces han de pagar
sus hechos pues los secuaces.

Imp. de «La Justicia», Nataniel 98-A

Ver lira completa

ALEVOSO ASESINATO
El hijo que mató al padre por
casarse con su querida

  En el Perú fué lectores
donde esta escena ocurrió
que narraré mui bien yo
con todos sus pormenores.
Mui cerca de Miraflores
un mui buen padre vivía
con un hijo que tenia
en medio de gran placer
i que amaba a una mujer
con el alma i con la vida.

  Como el padre no gustó
que tan jóven se casara,
una noche, ¡quién pensara!
a achazos lo ultimó,
i despues que consumó
este crimen parricida.
arrancó con su querida
llevando plata, animales,
dejando los basurales
i la casa bien barrida.

  Tan pronto la policía
supo esta barbaridad.
los buscó por la ciudad,
por montes i cerranías
mui cerca de veinte dias
sin poderlos encontrar.
Este crímen sin igual
ha causado gran espanto
i merece, por lo tanto,
un buen castigo ejemplar.

  Este drama tan sangriento
dá no sé qué relatar
i al ponerse a contemplar,
causa terror al momento.
Es poco darle un tormento
en un suplicio mayor
a ese hijo traidor
que a su padre le dió muerte
para quedar con su suerte
i joyas de gran valor.

  Dicho padre se llamaba
Pedro Nolasco Galas,
i su hijo José Tomas
que siempre lo acompañaba.
La niña con quien trataba
era Leonor Bascuñan:
dospues de habor hecho el plan
se fueron lijeramente
i están en lo presente
buscándolos con afan

Ver lira completa