CONSEJO
Y REPRENSION AL MAL CASADO

  ¿Por qué no amas a tu esposa
Hombre, no seais mal casado:
Aquel que no sabe amar
Es de todos mal mirado,

  Si tu mujer es honrada
Mucho la habeis de apreciar
I nunca la has de olvidar
Ni por un pienso por nada
Manéjala bien cuidada
Como la flor mas hermosa
I mas si es bella i juiciosa
Cúidala estando junto
I por este mismo asunto
Por qué no amas a tu esposa.

  No la habeis de reprender
Porque es darle mas pesar
Ni nunca la has de cambiar
Por otra mala mujer
Ni ménos darle a entender
Que con otra estás templado
Eso no está decretado
En el Santo Sacramento:
Cumple con el mandamiento,
Hombre, no seais mal casado.

  Si ella te asiste puntual
Vos le habeis de dar consuelo
Si ingrato le cobras celos
Tú mismo te haces el mal
No encontrarás otra igual
Si se te manda cambiar
Todos te han de reparar
Dice el mismo Satanás
No mire mujer jamas
Aquel que no sabe amar

  I si ella se encaprichara
I te quisiera matar
De vos tendrian que hablar
La vez que te traicionara
Se lo sacarás en cara
Lo mal que te haya pagado
Siendo que Dios te la ha dado
No la hagas padecer
Quien maltrata a la mujer
Es de todos mal mirado.

  Al fin la mujer diré
Es del hombre medianera
Firme i mui leal compañera
Como en la historia se vé
Todo esto yo lo sé
Por eso es que lo relato
Si él le pega por ingrato
Digo que está mal fundado
No porque sea casado
Le vaya a dar un mal trato.

Ver lira completa

VERSOS DE SENTIMIENTO

  ¿Con qué flecha me tiraste
Que a todo mi cuerpo heriste?
Dime qué datos tuviste
Que a mi corazon dañaste?

  Ingrata, me habeis borrado
De la lista del amor
Si a tí no fuí traidor
Por qué me has menospreciado?
En un lamentable estado
Tú por otro me dejaste
I aunque al mundo me arrojaste
Que llorar a mi pesar,
No he podido adivinar
Con qué flecha me tiraste.

  La vez que no llego a verte
Lo paso desconsolado
Solo por ser tu adorado
No le temo ni a la muerte.
En mi desgraciada suerte
Siento un pesar que me asiste,
I la vez que el si me diste
De amores tan verdaderos
Con tus ojos hechiceros
A todo mi cuerpo heriste

  Tu imájen me conquistó
I no me tienes amor:
En brazos de otro amador
No pensaba verte yo
Mi corazón me avisó
Que a mi amor te resististe
El que suspire i palpite
Tus ojos no lo han de ver
Para hacerme padecer
Díme ¿qué datos tuviste?

  Si me llegas a olvidar
Como suele acontecer,
Soi firme i te he de querer
Porque nací para amar
Te tengo que avasallar
Aunque otro por tí me mate
No me importa de que gaste
Los ojos con que te miro,
Si me has mandado un suspiro
Que a mi corazón dañaste.

  Al fin ¿cuál es tu intencion?
Dime si remedio no hai:
¿Qué haces de que no le dai
Alivio a mi corazon?
En tí pongo mi aficion
Como amante verdadero,
Dichoso me considero
Si es que muera hoi o mañana:
Duélete de de mi, tirana,
I dame lo que yo quiero.

Ver lira completa

TERRIBLE DESGRACIA
UNA MUJER AHORCADA

  Sin saber por qué razon
Una mujer se ahorcó
Porque sola se mató
No tuvo de Dios perdon

  De pena i de sentimiento
Dispuso darse la muerte
Porque la opresora suerte
Le trajo aquel mal intento
Nadie le oyó su lamento
Sin duda en esa ocasion
A hacer cumplir su intencion
Vino la parca atrevida
Solo a quitarle la vida
Sin saber por qué razon

  Salió la pobre llorando
Un dia de madrugada
Caminando apresurada
A todas partes mirando
Pero penetró rezando
I a un árbol se atracó
El cordel lo preparó
I el hecho ha sido de nombre
Porque no la quiso un hombro
Una mujer se ahorcó.

  Con un corazon atroz
Marchando con paso fijo
Dejando en el mundo un hijo
A la inclemencia de Dios
Llegó aquel momento atroz
Que el plazo se le cumplió
De rodillas se postró
Clamando a la virjen pura
I no halló en ella dulzura
Porque sola se mató.

  Todas las niñas señores
Bueno es que tomen ejemplo
Al ver lo que aquí contemplo
No caigan en sus herrores
Esta muerte mis lectores
Ha causado admiracion
Pues con mucha sensacion
Digo de un improviso
Porque lo hizo en sano juicio
No tuvo de Dios perdon.

  Al fin la finada es Rosa
I el amante es Pedro Juan
Como que aquí lo verán
Sin faltar ninguna cosa
La muerte ha sido horrorosa
I a todos lástima dá
Causa grande novedá
Me dijo el que me contó
Que a los tres dias se halló
A la infeliz en verdá.

Ver lira completa

LA BATALLA DE CONCON
¡DERROTA DEL EJÉRCITO CANALLA!

  Hácia el lado de Concon
Alcérreca el jeneral
Mas feroz que un animal
Peleó con su division.

  La escuadra desembarcó
Gran número de valientes
Heróicos mui competentes
A los de tierra atacó.
El tiroteo empezó
Al retumbar del cañon
Todos en su posesion
A orillas del Aconcagua
Corrió la sangre como agua
Hácia el lado de Concon.

  Creyeron los maricones
Lo que aquí les contaré
Que con atacar la fé
Iban a ganar millones.
Estos inícuos sayones
Allí la sacaron mal
La hueste dictatorial
Avanza i desprecia el ruego
Mandándola hiciera fuegó
Alcérreca el jeneral

  La Esmeralda desde el mar
En ese glorioso dia
Con su bella puntería
Me los hacia volar.
Lástima me dá contar
Que en el ataque brutal
Con entrañas de chacal
Pretendia aquel canalla
Combatir en la batalla
Mas feroz que un animal

  Los mas valientes pasaron
Con el agua a la cintura
I muchos la sepultura
En la corriente encontraron.
Un punto no acobardaron
En aquel sério encontron
El fiero i malvado leon
De parte del ruin tirano
En aquel compo inhumano
Peleó con su division.

  Al fin, de parte del vil,
Esta no es ponderación,
De las tropas del Neron
Murieron como ocho mil.
Nuestro jefe varonil
A todos los derrotó
I la victoria cantó
Puesto que ya le convino
I por milagro divino
El Gobierno aquí se hundió.

Rosa Araneda, Calle de los Andes, núm. 11-A

Ver lira completa

LA HUIDA
DEL
TIRANO DE LA MONEDA

  Mucho tiene que llorar
Señores el presidente
Han de brotar de sus ojos
Las lágrimas a torrente.

  Ya ganó la Oposicion
I el bravo perdió la silla
Se le cambió la tortilla
Para su condenacion.
Se acordará del balcon
En que ántes solia estar
Le vá a servir de pesar
Talvez hasta ver la muerte
Su desgracia i mala suerte
Mucho tiene que llorar.

  El plan no le salió bueno
Al infame dictador
Que por hacerse invasor
Perdió lo mas por lo méno.
Despues de estar tan sereno
De una manera impotente
Se quiso marchar urjente
Con intencion de librarse
Por ver si puede escaparse
Señores el presidente

  Al que ántes era gobierno
Pueblo compatriota dile
Que se ha de acordar de Chile
Cuando se halle en el infierno.
I ya que en el mismo averno
No le dejarán despojos
Lo aseguro sin enojos
De una manera formal
Que agua como temporal
Han de brotar de sus ojos.

  A la una poco más
Se fugó de la Moneda
El tirano Balmaceda
En busca de Satanás.
Pero mientra esté en la paz
Lo ha de buscar el viviente
Aunque fué tan de repente
Para emprender su partida
Verá miéntras tenga vida
Las lágrimas a torrente.

  Al fin, viendo su castigo
Pedirá el perdon a grito
Al Poderoso Infinito
Tan cierto como aquí digo.
Aunque fué tan enemigo
De la santa relijion
Yo con devota intenci0n
Por más que haya hecho destrozo
Espero en el Poderoso
Que le ha de dar el perdon.

Ver lira completa

Carta del jóven Cárlos Flores
UNA DE LAS VICTIMAS DE LO CAÑAS

  Hoi me voi a despedir:
—Adios, le digo, papá..
—Ruegue por su pobre hijo
Usted, querida mamá

  Con cariño i dulce voz,
Viendo mi fin tan cercano,
Tomo la pluma en mi mano
Para decirles adios,
El plazo viene veloz
I pronto voi a morir,
Pues no podré resistir
De un tirano el cruel castigo…
De mis parientes i amigo
Hoi me voi a despedir.

  Como seria el tormento,
Digo sin ninguna falta,
Cuando leyeron la carta
En aquel triste momento.
Con pena i abatimiento
El se las mandó de allá
Diciendo en conformidá
Pasen la vista por él
I al leer este papel
Adios le digo papá.

  El padre con gran tristeza
I saber lo sucedido
Marchó casi sin sentido
Al punto con lijereza.
Viendo que en tanta bajeza
Moria cierto i de fijo
Cuando llegó lo bendijo
En el nombre de María
Le dijo él en su agonía
—Ruegue por su pobre hijo.

  Adios querida Leonor,
Adios Anselmo i Blanquita,
Adios Joaquin i Paulita,
Muero sin ningún dolor.
A Dios pidanle un favor
Que me mire con piedá:
Guillermo, en la eternidá
Yo te tendré en la memoria
I crea voi a la Gloria
Usted querida mamá.

  Al fin, ya me voi al Cielo
Sin demorarme nadita
Se lo digo, mamacita
No llore, tenga consuelo.
Mi alma va a emprender el vuelo
Adonde un Dios Soberano
Llegaré con pecho sano
Porque he tenido la suerte
De preferir esta muerte
Por no servir al tirano.

Ver lira completa

Postergacion del Fusilamiento
DE JUAN RAFAEL ALLENDE

  Viviendo oculto, señores,
Juan Allende en un suplicio,
Se le quitarán las gana
De volver a hacer perjuicio.

  Es uno de los tiberios
Que cuenta al Cielo irá a dar
Porque amenazó quemar
Conventos i monasterios.
Sufriendo castigos sérios
Se hallan muchos escritores
Esbirros, calumniadores,
Por su suerte estrafalaría,
Allá en la Penitenciaria
Viviendo oculto, señores.

  En el carro selular
De la Intendencia salió
En la noche i se llevó
Donde suelen fusilar,
No se quiso publicar
Ni se dió ningún indicio,
I por esto yo malicio
Que al final de su partida,
Irá a pagar con la vida
Juan Allende en un suplicio.

  Para todo era mui franco,
Mui insolente i mezquino,
Por eso será su sino
Talvez morir en el banco.
Yo diré que a cada tranco,
Con su lengua tan profana,
A la relijión cristiana
Ultrajaba, i es mui cierto
Que solo despues de muerto
Se le quitarán las gana.

  En Santiago lo pillaron
Vestido de campesino;
Porque era pájaro fino
Mui bien me lo aseguraron.
A prision lo sentenciaron
Los jueces, i yo diviso
Que pagará lo que hizo
Con tanta desfachatez.
Sin que éste piense otra vez
De volver a hacer perjuicio

  Por fin, no tuvo valor
Ni pidió ninguna gracia:
El peso de su desgracia
Lo sumió en hondo dolor.
En medio de su pavor.
Aquel hombre temerario,
Pasó rezando el rosario
Prosternado de rodillas.…
¡Que todos los cabecillas
Sufran el mismo calvario!

Imp. Estrella de Chile, San Diego, 75

Ver lira completa

Versos de amor
SEPARACION DE UN AMANTE

  Ya fuí a mi viaje i volví,
A tu presencia llegué,
En lo que me demoré
¿Te has acordado de mí?

  Me retiro con tristeza,
Desde tu lado señora,
Pero pienso cada hora
En tu hermosura i belleza;
Al punto i con lijereza
He de volver donde tí.
El tiempo que me perdí,
Ha sido por buscar suerte;
En prueba que sé querete
Ya fuí a mi viaje i volví.

  Cuando me encuentre distante
Te mandaré una razon,
Pidiendo me des perdon,
Que seré tu fiel amante;
Como peregrino errante
Desde que me separé.
Muchas lágrimas lloré,
Cual si fuera Magdalena,
Por declararte mi pena
A tu presencia llegué.

  A buscar con sentimiento,
Me separo de tu vista,
Por estar a tu conquista
Año se me hace un momento.
Se aumentó mi contento,
Luego que te divisé;
Tambien te preguntaré,
Con mi humilde corazon
Si has cambiado de pasion
En lo que me demoré.

  En una correspondencia,
Que me entregó el portador,
Me propuse con amor
De ponerme a tu presencia.
Me faltó la resistencia,
Despues que la recibí;
Tan pronto que la leí,
Fué mas doble mi tormento,
De ver que ni en pensamiento
Te has acordado de mi.

  Al fin mi adorado encanto,
Vengo pisando entre abrojos,
A quitarte los enojos
Con un entusiasmo santo.
No te cause ni espanto,
Por lo que me he demorado;
Debo de ser perdonado,
Si te he hecho alguna ofensa,
Ya que me hallo a tu presencia
Debo de ser perdonado.

ROSA ARANEDA
CALLE DE SAMA, NUM. 73-A

Ver lira completa

DESPEDIDA
del reo Manuel Pozo

  Adios, mi hermosa nacion,
Se te va un parroquiano
Con un Señor en las manos,
Pidiendo a todos perdon.

  Adios, Chile, patria mia;
Carmela, bella patrona,
Por tu preciosa corona
Pido que seais mi guía:
Háceme pues compañía
En esta triste afliccion,
Con tu lindo pabellon;
Hoi que ya me voi a ir
Primero voi a decir
Adios, mi hermosa nacion.

  Adios, cárcel de Santiago,
O triste penitenciaría;
Por una accion temerara
Lector, con mi vida pago;
Este recuerdo les hago
A todos, con pecho ufano,
Con un sentir soberano
Sin detenerme un segundo,
De esta tierra, al otro mundo
Se te va un parroquiano.

  Adios, justicia chilena,
Corte, tribunal sagrado,
Porque ninguno ha fallado
En darme la cruel condena.
Adios grillo, adios cadena,
Adios nobles ciudadanos,
Adios todos mis hermanos;
Hoi cesa mi padecer:
Me voi para no volver
Con un Señor en las manos.

  Adios, mundo engañador,
Que a mí me habeis engañado,
Hasta hacerme desgraciado
Asesino i malhechor.
Adios, digo con valor
Porque llegó la ocasion,
Con rendido corazon,
Penoso i atribulado,
Muero en el banco sentado
Pidiendo a todos perdon.

  Al fin, dijo el desdichado
A la concurrencia así:
No les pase lo que a mí
Que voi a ser fusilado.
Todos vivan con cuidado
Cuando se hallen en la escala,
Porque si toca la mala,
Dice el refran por entero:
En la casa del jabonero
El que no cae resbala.

Ver lira completa

EL REO
marchando al suplicio

  Sale rezando formal
El infeliz Manuel Pozo,
Desde el mismo calabozo
Hasta el banquillo fatal.

  El dia de su tormento
Con mui apacible cara
En la celda se prepara
A entregar a Dios la cuenta.
El morir no le amedrenta
Ni lo entristeció al mortal,
Porque era de natural
Con un valor sobre humano;
A expirar como cristiano
Sale rezando formal.

  Antes que llegue la hora
Se pondrá en penitencia
Pidiendo el reo clemencia
A María, gran señora,
Como madre i protectora
En compaña de su esposo
San José, santo glorioso;
Para que le den la palma
Les encomendó su alma
El infeliz Manuel Pozo.

  Cuando ya vaya en camino
Será tremendo el dolor;
Al cadalso aterrador
Llega a cumplir su destino
Pensando en el Dios divino
Irá contrito i penoso,
A su lado un relijioso
Con dulzura, i tierna voz,
Lo irá encomendando a Dios
Desde el mismo calabozo.

  Al salir del oratorio
Caminaba sin temor,
A entregar su alma al Señor
I despues al purgatorio.
Aunque es por demas notorio
Roguémole al Celestíal
Como Dios anjelical,
Por su santa providencia
Le dé al reo resistencia
Hasta el banquillo fatal.

  Al fin la jente miraba
Al reo que iba marchando,
Con los grillos caminando
De la prision donde estaba.
Al momento que llegaba
La concurencia esclamó,
El pobre a todos miró
En esta triste ocasion;
Dijeron: por compasion
Santo Dios, perdonaló.

Ver lira completa