Hay una escuela sin techo
Por José Mur, poeta popular de La Calera
Hay una escuela sin techo
que se precisa de urgencia
para capear la inclemencia
del invierno, y este hecho
yo lo relato en provecho
de una vasta población
que lo sepa la nación
y que lo sepa el Gobierno
como se transformó este infierno
en progresista región.
Hicieron colonización
proletarios desplazados
como todos amargados
por falta de habitación,
con barro, piedra y sudor
algunos ranchos alzaron,
luego, en seguida, pensaron
dotar de escuela al lugar,
alimento espiritual
pa sus hijos, anhelaron.
En seguida levantaron
los muros en comunión
fué la primera lección
a los que allí trabajaron
“La unión es fuerza” cantaron
los muros al levantarse,
(y una lección de anotarse
en esferas oficiales);
que no habrían tantos males
si al pueblo dejan formarse.
Todos deben informarse
que aún redoblando el esfuerzo,
aún achicando el almuerzo
no ha podido terminarse;
deben todavía armarse
piso, ventanas y techo,
lo relató con despecho
ante desidia oficial,
bien podrían ayudar
para hacer pródigo el hecho.
Del río Aconcagua el lecho
algo al Sur de “La Calera”
esta población obrera
hizo zona de provecho:
es un feraz corto trecho
que lo llaman “Las Cabritas”
yo lo bautizo en su agüita
“Colonia Aconcagua”…amén
¡Que sacramenten también
la ayuda pa su escuelita!