El destructor del hogar
por Máximo Ramírez, poeta popular de Santiago.
Todo lo noble y hermoso
lo destruye el vil alcohol:
el pobre hogar y el suntuoso,
la fe, la vida, el amor.
Es el ogro pernicioso
que mancilla la virtud
y en el hombre va dejando
el dolor y la inquietud.
¡Oh!, vicio nefasto, infame,
qué de daños has causado,
dejando en la humanidad
miseria, dolor y estragos.
Con su elocuencia la historia
al mundo va demostrando
que el alcohol por donde pasa
va los pueblos devastando.
En los días más luctuosos
de la Roma decadente,
a los hombres pervertía
el fiero Baco inclemente.
Ebrios empedernidos
siempre serán y lo han sido,
los más crueles sanguinarios,
los tiranos que ha habido.
Con su huella destructora
todo lo pierde, lo absorbe
y los males acrecienta
a su paso por el orbe.
Pueblo, vigila anhelante,
que no entre ese destructor,
porque pervierte la vida,
la dulce paz y el honor.