Dialogo entre un campesino y un minero del carbón
Por Ismael Sánchez, poeta popular de Candelaria
EL CAMPESINO:
Amigo si usté es minero
y me quiere conversar:
dígame si son de ley
las minas del matadero .
EL MINERO:
Yo no conozco esas minas
sólo he probado la carne
en sueños, cuando tengo hambre
a veces como sardinas.
EL CAMPESINO:
Amigo, si ustedes minero
¿cómo tiene el corazón?
dígame si algún pulmón
p’al gato le queda bueno.
EL MINERO:
Mis pulmones son de acero
se hicieron en Guachipato
un surtidor bien barato
de sangre para el prietero.
EL CAMPESINO:
Amigo, como minero
¿En que se desempeñó?
O solamente sirvió
¿para acarrear el puchero?
EL MINERO:
Por favor, si en él su suelo
–Esto debajo del horno–
saqué los sacos al hombre
ayudándole a mi abuelo.
EL CAMPESINO:
Me imagino caballero
que usté debe ser pariente
de otro que engañó a la gente
“dándoselas de minero”
EL MINERO:
Ese era un aventurero
de régimen ya pasado
un papel bastante ajado
que se llevó el basurero.
EL CAMPESINO:
Amigo si no es farsante,
como poeta del carbón
dígame, ¿porqué es mejor
el que nos traen los yanquis?
EL MINERO:
Amigo, no hay diferencia
creo que estamos de acuerdo;
aquí lo traen por “negro”,
y eso ¿qué tiene de ciencia?
Si es campesino mi amigo
voy a hacerle esta pregunta:
¿Por qué está cara la fruta?
¿Por qué no se siembra el trigo?
EL CAMPESINO:
Este problema es sencillo
muy fácil la explicación
porque no quiere el patrón
y no es dueño el inquilino
EL MINERO:
Amigo se me ha olvidado
hacerle otra preguntita,
Si siembran los “laboristas”
¿por qué no se ve el sembrado?
EL CAMPESINO:
Son agros falsificados
viven en la capital
y nunca van a sembrar
si no conocen arado
EL MINERO:
Si es huaso y vive feliz
¿por qué no usa la espuela?
¿y por qué la correhuela
siempre encadena el maíz?
EL CAMPESINO:
¿Por qué no me dijo antes
su pregunta favorita?
esa es la “Ley Maldita”
de tipo y de corte yanque.
EL MINERO:
Yo quiero que usté me entienda
¿qué pasa en la agricultura?
¿por qué muchos aseguran
que no vale lo que siembran?
EL CAMPESINO:
No me enrede con esa cuerda
distinguido caballero
yo empecé como “estanquero”
hoy administro la hacienda
EL MINERO:
Dígame entonces ¿por qué
si el campo es tan prodigioso
se contrata tanto ocioso
y no se sabe pa qué?
EL CAMPESINO:
Eso nos manda Samuel
como teóricos de espías
que nos coman la “comida”
y le compremos a él.
Ahora amigo querido
vengan sus cinco jazmines
y brindemos porque Chile
jamás sea sometido :
Aunque nos sobran motivos
pa dudar del que reincide
en nuestro corazón vive
la fe de un pueblo araucano
los que intenten traicionarlo
mejor es que se suiciden.