El guasito reparón
por El Ruiseñor Curicano
Salí de la rinconá
y me fui a tomar el tren
para saber yo también
lo que pasa en la ciudá:
es mucha la pallasá
están muy raras las modas
la gente allí se acomoda
con vestuarios diferentes
oiganme pa que les cuente
la forma de casi todas.
En la mujer ya es diablura
pa ir desnuda poco falta
ya no tapan ni dos cuartas
más abajo e’ la cintura;
al verlas se me figura
que el marido es muy tacaño
compra media vara e’paño
pa vestir su pior es ná
por eso el traje vá
lo mesmo que traje e’baño.
Uñas y boca pintá
que les llega a coloriar
tal vez quieran engañar
de que es color de verdá;
la vieja que está arrugá
se pinta como consuelo
se arrebolan como el cielo
con tintes blanco y rosao
les queda el rostro pintao
como torta e’biscochuelo.
Ya no hay mujeres moñonas
las trenzas se han acabado
van con el pelo cortado
como potrancas rabonas;
casadas y solteronas
se han pelado la cabeza
y yo vi una vieja de esas
que se pelan le cogote
que se parecía a un jote
o gallina japonesa.
DESPEDIDA
Y los hombres achutados
usan los carsones anchos
pior que la culata ‘el racho
y zapatos recortaos:
quién sabe de onde han sacao
pa vestirse tanta maula
allí de otro modo se habla
yo me tuve que arrancar
Me querían obligar
a andar con sombrero ‘e tabla.