Ruidos molestos

Ruidos molestos
por Ricardo González, poeta popular de Viña del Mar

CUARTETA

La Alcaldía lo ordenó
terminar ruidos molestos,
cualquiera que sean éstos
la bulla ya terminó.

GLOSA

Me quedé un día dormido
y me fui sin desayuno,
pitos no tocó ninguno,
pues les está prohibido;
casi me echan despedido,
ignoró qué me salvó,
el jefe que se enojó,
porque no pudo gritar,
callao tendrá que estar
la Alcaldía lo ordenó.

La vieja un gallo mató
porque era muy cantaor,
junto al perro ladraor
hasta al gato liquidó;
al salir me fijé yo
que al tren ya le habían puesto
unas ruedas de repuesto
de goma bien silenciosas
resulta fácil la cosa,
terminar ruidos molestos.

Todo caballo cochero,
debe aquí usar alpargatas
y ajustarán bien las latas
a sus micros los micreros;
ambulancias y bomberos,
que siempre se encuentran prestos
y patrulleros por cierto,
too les tá permitido,
pueden meter bulla y ruido
cualquiera que sean éstos.

Yo uso crep silenciador
o ando a pata pelá,
avión que vuele pacá,
tendrá que ser sin motor;
aquí ya too es mejor,
ya la gente se olvidó
que toito aquí subió
ya hasta la guata vacía
no necesita comía,
la bulla ya terminó.

DESPEDIDA

Por fin, silencio completo,
existe ya en la ciudad,
pa’ construir es verdad,
usan plumas, no concreto;
cuando yo leí el decreto
en un diario que encontré
al tiro yo me callé
y harto me gusta cantar
y cuando me fui a acostar
con todito esto soñé.

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A la Sociedad de Poetas Populares

A la Sociedad de Poetas Populares
por Francisco Astroza, poeta popular de Santiago

CUARTETA

Sociedad grande y valiente
que me invitas a ingresar,
más deseo yo aportar
y cantar directamente.

GLOSA

Con permiso, Directores
y toda la Sociedad,
me gusta a mi la unidad
de tan sinceros cantores;
de tan vivos resplandores
que suena en el Continente
de los aquí ya presentes
la décima y la cuarteta
de tan divinos poetas,
Sociedad grande y valiente.

Agradezco invitación
que me hace la Sociedad
con toda sinceridad
la acepto de corazón;
aunque yo no soy cantor
y sólo escribo no más
con toda curiosidad
ni lo hago sentimental
obedezco esta ocasión
que me invitas a ingresar.

Hermosa organización
de proporción colosal
tus glosas han de cantar
con justicia y con pasión;
denunciar la situación
que pasa el proletariado
luchar si es atropellado
todo en tu verso cantar
y si algo he colaborado
más deseo yo aportar.

Mirando yo esta gran Lira
en un sábado corrido
vi mi nombre y apellido
y a ingresar mi ser aspira;
como es verdá y no mentira
que yo escribo solamente
aunque algo mala es mi mente
para poderlo pensar
y décimas yo formar
y cantar directamente.

DESPEDIDA

Al final voy a pedir
si también puedo ingresar
en la Lira Popular
y con todos compartir;
la paz y unidad sin fin
para todo ser humano,
vamos todos de la mano
homenajes a rendir
y al pueblo vamo a servir
en contra de los tiranos.

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Las clases sociales

Las clases sociales
por José del Carmen Yáñez, poeta popular de Llepo

Según la Constitución
en Chile somos iguales
todos los pobres mortales
que habitamos la Nación;
pero es pura explicación
a mi modo de entender,
porque todos pueden ver
re tantas clases sociales
si todos somos iguales
¿por qué clases han de haber?

Tenemos la aristocracia,
aquellos de Zapallar
que se han dado el titular
ser de familias muy rancias;
mas yo no le hallo fragancia
ser de familia anticuada
esta es pura payasada
no da nobleza el dinero
en los falsos ganaderos
la verdad está demostrada.

Tenemos a los patrones
que es otra  clase social
pues al hacerse industrial
ya perdieron los blasones;
pero tienen a montones
el dinero que han ganado
o mejor que han explotado
al pueblo trabajador
y sin conciencia ni honor
se creen privilegiados.

La clase media es decente
pues toditos son empleados
algunos muy bien trajeados
pero no tienen ni un veinte;
es una clase valiente
cuando se pone a luchar
y si quiere conquistar
mejoría en el salario
debe aliarse al proletario
si su deseo es triunfar.

DESPEDIDA:

Debemos reconocer
que hay algo que respetar
y es el don intelectual
que el hombre trae al nacer;
porque un Franklin puede ser
un Lenin o un Carlos Marx
un Beethoven, un Chopin
un Stalin, Gutenberg
un Edison o un Pasteur
y otros que ustedes sabrán.

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El tremendo temporal

El tremendo temporal
por Guillermo Hernández, poeta popular de Santiago

Temporal de proporciones
el que se dejó caer
con perjuicios a granel
en humildes poblaciones;
destruyendo habitaciones,
dejó a muchos sin hogar,
es todo ruina el lugar
donde una casa existió,
todo en el suelo dejó
el maldito temporal.

Daba lástima de ver
las poblaciones enteras,
las callampas las primeras
que tenían que caer;
al comenzar a crecer
los ríos como bribones,
verdaderos aluviones,
dando mortales abrazos
con sus asesinos brazos
arrasando poblaciones.

Como siempre ha de pasar,
la fregá es la clase obrera,
como si nadie pudiera
tratar algo de evitar;
no se trata de atajar
cuando viene inundación,
si no que de previsión,
dar terrenos apropiados,
seguros y urbanizados,
como primera cuestión.

A quiénes les corresponde,
no se deben olvidar,
pronto hay que solucionar,
atacando fuerte donde
la raíz del mal se esconde
y no sólo con promesas,
que la gente no es muy lesa,
sabe lo qué necesita:
menos tanques, más casitas,
menos teatros, más franquezas.

DESPEDIDA

Por fin, que los afectados,
algo en limpio han de sacar,
con unidá a batallar,
por que sean escuchados;
que no sean tramitados,
cuartel no pedir ni dar,
y no vuelvan a esperar
que estudiarán la cuestión,
que la mejor solución
la unión la tiene que dar.

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Lamentos de un desgraciado

Lamentos de un desgraciado
por José Pino Toro, poeta popular de San Fernando

CUARTETA

Mándame quitar la vida
si es delito el adorarte
yo no he de ser el primero
que muere por ser amante.

GLOSA

Ingrata mal pagadora
a quien te ha querido tanto
no he podido con mi llanto
de ser tu amante, traidora;
mi corazón gime y llora
al ver a mi alma afligida
en un pesar sumergida
y en un continuo batallar1
mándame a quitar la vida.

Desde que te conocí
nunca he dejado de amarte
con un amor delirante
que me hace mucho penar;
cuando te llego a encontrar
me da miedo saludarte
con el solo mirarte
me dejas muy acholado
como si fuera un malvado
si es delito el adorarte.

Con contestación muy poca
me esperanzaste, tirana
regálame hoy o mañana
un si de tu linda boca;
aunque mi esperanza es poca
dichoso me considero
ya ves que me desespero
y la suerte me maltrata
en sufrir por una ingrata
yo no he de ser el primero.

Cuando salgo a trabajar
padeciendo de continuo
andando por el camino
triste me pongo a llorar;
porque no te puedo hablar
ni mucho menos mirarte
y al verte tan inconstante
pienso dejar de existir
pa que tengan que decir
que muero2 por ser amante.

DESPEDIDA
Por fin vengo a suplicarte
ablandes tu corazón
y me concedas perdón
por atreverme yo a hablarte;
al verme tan suplicante
y cansado de esperar
dijiste: “voy a pensar”
y nada has dicho hasta aquí
tampoco me contestaste
la carta que te escribi.

COGOLLO3

Me llaman el José Pino
nieto ‘el finao Pascual
por fuerza me han de querer
que no les pagaré mal;
purísimo angelical
mi cuerpo es muy inocente
todo esto lo hago presente
otórgueme la mercé
porque si no lloraré
las lágrimas a torrentes.

1  Errata del impreso, falta una línea.
2  No corresponde con la cuarteta.

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Verso de amor

Los clásicos
Verso de amor
por Francisco Ugarte, poeta popular de Pupuya

NOTA: Esta versión fué recogida por don Camilo Rojas Cáceres, de labios de su anciana madre, en Pupuya.

CUARTETA

Yo te quisiera querer
y tú madre no me deja
maldita sea la vieja
que en todo se ha de meter.

GLOSA

Eres el ser de los seres
tan perfecta y tan hermosa
la perlita más preciosa
encanto de mis placeres;
entre todas las mujeres
llegas a resplandecer
eres lucero al nacer
y tal vez una estrellita
por lo graciosa y bonita
yo te quisiera querer.

Eres la luna en creciente
del celeste firmamento,
eres mi dicha y contento
como el sol resplandeciente;
eres cristalina fuente
donde tu rostro refleja
tu figura se asemeja
lo más hermoso y bonito,
quisiera darte un besito
y tu madre no me deja.

Eres la ninfa encantada
de los palacios del mar
eres fragante azahar
como la flor más preciada;
tu figura venerada
si de mi lado se aleja
yo le digo en triste queja
con amoroso semblante
cuando de mi estás distante
maldita sea la vieja.

Eres tal como una diosa
que mata las penas mías
me devuelves la alegría
con tu mirada amorosa;
quisiera decirte en prosa
lo grande de mi querer
de amor ya no hallo qué hacer
y mi vida se marchita
por causa de tu mamita
que en todo se ha de meter.

DESPEDIDA

Al fin, cuando ella se muera
por lo tanto que he esperado
te has de venir a mi lado
con tu sonrisa hechicera;
entonces mi vida entera
te daré, paloma mía,
tú me darás la alegría
para conciliar el sueño
sabiendo que soy tu dueño
hasta la última agonía.

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Al poeta popular Rebolledo

Al poeta popular Rebolledo
Por Julio Solís, poeta popular de Chimbarongo

CUARTETA

Agradezco la atención
del poeta santiaguino
hasta aquí llegó su trino
muy dentro del corazón.

GLOSA

Cuando “El Siglo” recibí
y ví el fraternal saludo
casi el corazón no pudo
contener lo que sentí;
la emoción que había en mí
con los nervios en tensión
me hice la proposición
de esta idea en mi cabeza:
contestar la gentileza
agradesco su atención.

Hoy un poeta del pueblo
y le canto a sus dolores
a su alegría y amores
ante sus miserias tiemblo;
en las almas puras siembro
con lenguaje cristalino
compadeciendo su sino
que lo tiene esclavizado
la redención he escuchado
del poeta santaguino.

Siento una grande emoción
al ver que yo no voy solo
que siempre de polo a polo
está nuestra férrea unión;
seguimos nuestro camino
sin importarnos un bledo:
gran poeta Rebolledo
hasta aquí llegó su trino.

Contra el odio y la injusticia
está nuestra indignación
contra la persecución
nuestro canto sin malicia;
también contra la estulticia
que no pierde la ocasión
de atacar verdá y razón
dondequiera que ésta se baile
aunque la ambición le estalle
muy dentro del corazón.

DESPEDIDA

Pa terminar estos versos
la imaginación me dure
su eco será el que perdure
con sonido puro y terso;
unidos nuestros esfuerzos
obtendremos la victoria:
pa Chile será la gloria
de nuestra lucha tenaz
le cambiaremos su faz
haciendo su nueva historia.

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Contrapunto entre dos leñadores

Contrapunto entre dos leñadores
Por Zoilo Cámela, poeta popular de Santiago (recoletano)

Ramón:
-Decime vos, Salomón,
que te gastay tanta maña,
¿Qué hariay en la montaña
si te apareciera el lión?

Salomón:
-Pues, rápiamente, una
caverna yo buscaría,
y en ella me escondería
de propio, sin dúa alguna.

Ramón:
-Y si por más que corriay
pa toas partes mirando,
caverna nu ibas hallando,
decime, entonce, ¿qué haríay?

Salomón:
-A un peñon bien elevao
me encaramaba di un salto,
y encontrándome así, en alto,
el lión quedabo colgao.

Ramón:
-Y si pasa que en tal parte
y en toa la cercanía,
ningún peñón alto había,
¿qué hiciéray vos pa salvarte?

Salomón:
-Pues bien, trepaba ligero
a un árbol de güena altura
y ahí quedaba segura
mi cuerpá, que tanto quiero.

Ramón:
-Y si árbol grande no hallábay
como suele suceder,
¡aquí te quisiera ver
la decisión que tomábay!

Salomón:
-Al ocurrir ese caso,
aunque hiciera mucho frío,
di un brinco saltaba al río;
pues nado muy rebienazo.

Ramón:
-Es verdá, muy lindo juera
que te echáray a nadar;
pero nónete1 a pensar
al río allí no existiera.

Salomón:
-¡Güen dar con este Ramón
que es d’indole bien perversa!
¿Así es que vos a la juerza
querís que me coma el lión?

1  Errata del impreso, debiera decir “pónete”

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Mi fraternal saludo a los poetas populares de Chile

Mi fraternal saludo a los poetas populares de Chile
Por Jorge, obrero del carbón, poeta popular de Coronel.

Voy saludando sincero
con mis sencillos cantares
a los puetas populares
de todo el país entero;
y como yo soy minero
saludo al pueta nortino
al del pueblo, al campesino
con un fraternal abrazo
como al pueta Edmundo Lazo
que es uno de los más finos.

Aunque mi mente se enreda
por no dar muy bien el blanco
pero aplaudo a Luis Polanco
y a los puetas Castañedas;
en fin yo haré lo que pueda
hasta hacerme soberano
con mi verso puro y sano
tambien con olor a menta
por la digna presidenta
que es Agueda Zamorano.

Saludo al pueta Grandón
y al pueta de Rancagua
Paredes de Tagua Tagua
que pa versiar es campión;
son saludos del carbón
que ojalá sean de agrado
y si van algo tiznados
perdonen por via suya
saludo al pueta ‘e Pupuya
y al gran Lázaro Salgado.

Al Director de alta escuela
que es don Diego Muñoz
al pueta ‘e Curicó
y a la doña Inés Valenzuela;
José Riel que no se hiela
son puetas de pecho y pana
como la sangre araucana
Martínez Navia y Chandía
Cantaclaro, Mora y Díaz
como Alejandro Quintana.

DESPEDIDA:

Al fin, ya por terminar
saludo al pueta de Iquique
valiente como cacique
y al pueta ‘e Viña del Mar
y a la LIRA POPULAR
donde yo soy trovador
como Hugo Sergio Amador
y poetisas muy bellas
que brillan más que la estrella
haciéndole a Chile honor.

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Luis Paredes Palominos, de San Vicente de Tagua Tagua…

Luis Paredes Palominos, de San Vicente de Tagua Tagua, quiere conocer Santiago en la Parada Militar. Por él mismo

CUARTETA

Aunque no tengo ni manta
y mi chaqueta parchada
iremos a la Parada
con mi compaire don Panta.

GLOSA

A Dios le pido que me ayude
pa en septiembre ir a Santiago
y tomarme un par de tragos,
ya que hasta aquí nunca pude;
la platiá nunca la tuve,
ni pa una ciega que canta,
a mi “papá” que le encanta,
huevitos me está juntando,
mi viaje estoy preparando,
aunque no tengo ni manta.

Voy ir donde un herrador,
que la manicura me haga,
como soy de buena paga
me la va a hacer sin dolor;
mi compaire Pantalión,
con su tremenda cuerpá,
su barba bien afeitá,
de chupalla y de pondón,
yo con mi buen corazón,
y mi chaqueta parchá.

La ciudad que mentan mucho,
quiero conocerla agora,
dicen poco se demora
asegún el ñato Lucho;
a mi no me importa un pucho,
si se pone alborotada,
ni menos de las miradas
de esos jutres harto ricos
para ver a los milicos,
iremos a la Parada.

También quiero aprovechar
para hacer una visita
y conocer de cerquita
nuestra Lira Popular;
voy a tratar de llegar
a Lourdes, mi Virgen Santa,
y si la guata no aguanta
pa ayunar esos tres días,
volvemos con nuestras crías,
con mi compaire don Panta.

DESPEDIDA

Pueda ser no se le antoje
de ir a la mi pior en ná,
me hace la gran embarrá
en caso que se me enoje;
muchas le dicen: no afloje,
que a mis pretinas se pegue,
también otras, que me niegue
unos pesos que ella tiene,
voy a ver si me conviene,
si no me quedo en mi albergue

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