Saludo a varios poetas

Saludo a varios poetas
Por Rosalindo Farías, poeta popular de Graneros.

A Hugo Amador:

Yo te alabo desde aquí
como incansable versista
mi opinión dejo a la vista
de mi mente vino a mí;
de sus versos percibí
el coraje y gran valor
los ví con el resplandor
de una cosa bien sacada
y en la Lira imprentada
poeta Hugo Amador.

A Jorge Obrero del Carbón:

Jorge Obrero ‘e Coronel
que trabajas en la mina
tus versos mucho me admiran
todos tienen su valer;
yo mucho gozo con él
tienes gran composición
y tienes ponderación
como poeta afamado
tus versos son apreciados
Jorge Obrero del Carbón.

A Marcelina Oviedo:

Muchos versos yo le he visto
casi todos he leído
pa mí emocionante ha sido
el verlos tan de improviso;
por eso Farías  quiso
verse en la Lira acogido
y al ver su sueño cumplido
se ha sentido muy feliz
y le mando desde aquí
Marcelina un verso mío.

A Edmundo Lazo:

Son sus versos muy medidos
y Ud. tiene gran talento
le nace en el pensamiento
el redactar de corrido;
nunca se encuentra afligido
contesta cualquier aviso
y compone de improviso
con mucha sabiduría
tiene usté Edmundo alegría
y su verso es de un proviso.

Para Agüeda Zamorano, la presidenta:

Con frases emocionantes
Agueda nos ha cantado
en sus versos ya grabados
de palabras palpitantes;
como canarios volantes
ha lanzado sus canciones
tienen ellas mil colores
y son una maravilla
porque sus frases sencillas
ganan nuestros corazones.

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Los amigos

Los amigos
Por Pedro González, poeta popular de Rancagua.

CUARTETA

En cárcel o enfermedad
no hay amigo sincero
pero si le ven dinero
les renace la amistad

GLOSA

Caramba que diferencia
cuando el hombre tiene plata
le hacen harto la pata
lo amigos sin conciencia;
tienen bastante paciencia
en conservar la amistad
si esto fuera de verdad
que buenos amigos fuesen
más todos desaparecen
en cárcel o enfermedad.

Si lo ven con buen trabajo
con casa bien arreglá
y que no le falta ná
lo visitan altos y bajos
le bolsean a destajo
sea empleado o sea obrero
pues gozar es lo primero
ojalá acostilla ajena
pero lo que da más pena
no hay amigos sinceros.

Si lo ven en decadencia
enfermo o bien atrasado
al punto se han retirado
ya no tiene más paciencia
ni siquiera por prudencia
tienen un rasgo sincero
olvidan al compañero
que está escaso de fortuna
le mecerían la cuna
pero si le ven dinero.

También los familiares
lo miran muy al revés
como no ven interés
visitan otros lugares
pero si hay cambios de azares
y vislumbran la verdad
se apuran en realidad
pa arreglar la situación
y buscando una razón
les renace la amistad.

DESPEDIDA

Y por fin aquí termino
con experiencia consigo
yo no más mantengo amigos
aunque me digan mezquino
en ésto yo pongo tino
soy duro como el membrillo
solo atiendo a mis chiquillos
y les oigo su clamor
porque el amigo mejor
es siempre nuestro bolsillo.

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Por causa’e la vida actual

Por causa’e la vida actual
Por Jorge Obrero del Carbón, poeta popular de Coronel.

No hay rincón del pueblo e’ Chile
que no sufra estos tormentos
crisis, alza y lanzamiento,
vivimos entre reptiles;
no hay conciencia ya gentiles,
esto no se vió jamás,
y al vernos así no más
ya me duele hasta la hiel
pasando una vida cruel
en un país que hay de más.

Si hasta mi mujer, la Toya,
la madre e’ mis pobres crías,
con la enorme carestía,
no halla qué echarle a la olla;
al verla antes tan macolla
y hoy mísera peor que rata
y mis chiquillos a pata
que ya parecen lombriz
con esta vida infeliz,
¡es el colmo, por la chuata!

Ya no cuadra hablar de roto
porque somos lo más peor,
ya no hay caldo con color,
ni repollos con porotos;
ni en los tiempos más remotos
había  este gran afán
los hijos del padre Adán
con tanto arqueo y ensanche
comimos en vez de manche
un trozo caro de pan.

Y si hay huelgas a montones
para pedir un pan más
no hallan la razón jamás
ni el Gobierno ni patrones;
y piensan que los peones
lo hacimos por hacer mal,
y amparan al industrial
o a cualquier rico extranjero
y dejan al pobre obrero
llevando su vida actual.

DESPEDIDA

Al fin por lo que comento
de lo que se hace ya eterno
‘tamos peor que en los infiernos
pagando pena y tormentos;
sobre vestuario y sustento
¡hasta cuándo, Dios, buen dar!
nos queda sólo luchar
hasta ganar la batalla
lo haremos, por la chupalla,
¡ya no se puede aguantar!

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Pidiendo jubilación porque soy merecedor

Pidiendo jubilación porque soy merecedor
(Petición al Presidente de Chile)
Por José Pino Toro, poeta popular de San Fernando.

N. de la R.; “Soy un hombre de 80 años, sordo y pobre, que no tengo cómo presentarme…”. Así se retrata este poeta en la carta con que nos envía una larga tirada de versos con este título. En ellos invoca sus servicios prestados al gobierno en el pasado, sin que haya recibido hasta ahora ningún beneficio.
Aunque no se atiene a la forma popular de la décima (como se verá, sus estrofas son de 12 versos y la distribución de las rimas no marcha bien) publicamos estos versos, porque se dirigen al final a Su Excelencia formulándole una petición.
A ver cómo le va.

Soy muy buen agricultor
y no tengo ningún vicio,
bueno pa todo servicio,
honrado y trabajador;
soy hombre de profesión
como si juera ingeniero,
soy tejero y ladrillero,
y también soy chacarero,
tejo alambre y molinero,
bueno pa la plantación
por séptimo hijo que tengo
fui compadre con el Lión.

Serví yo más de cinco años
Policía comunal,
en calidá e’ Comandante,
puesto por Guillermo Lyon
serví cargo a seis alcaldes
y de todos fuí estimao
porque me di a respetar,
yo no salí por mi gusto
llegaron Carabineros
y les tuve que entregar
también ahí merecía
me mandaran jubilar.

Este antiguo servidor
que es recuerdo del pasao,
ta pobre y desamparao,
porque bienes que ha obtenío
por peliar con los bandíos
toos me lo han estafado
y el Fisco no ha agradecío
a quien le serví quince años
recibiendo yo gran daño
y aún no me han jubilado.

Harto conmigo ha abusao
y me ha perdío el respeto
hizo un gran puente en lo mío
para pasar pa Codao
lo hizo de cemento armao
ahorrando hartos millones,
pues él me compró el cemento
yo puse el ripio y la arena
puesto ahí al pie de la obra
listo pa hacer el concreto
por eso ahorró millones
pues no lo compró por metros.

De mi cerro sacó piedra
que también ocupó mucha
y allí hizo unas casuchas
para dejar cuidadores
y esos me han pelado el monte
y hasta siembran en mi isla
crían de todo animal,
crían chanchos y gallinas,
sin que nadie los estorbe
y a mí viéndome tan pobre
dijo que me iba a pagar
y no me han dao ni cobre.

Tengo setenta y nueve años
qué tanto más duraré
ruego, General, a Usté,
se conduela de este pobre
que también fué militar
de conducta sin rival
según los certificaos
que mando pa comprobar,
y ahora que es Presidente,
obligue al Fisco tramposo,
que no sea veleidoso
y me mande jubilar.

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Mil gracias por los saludos

Mil gracias por los saludos
por Agueda Zamorano, presidenta de la Unión de Poetas y Cantores Populares de Chile.

CUARTETA:

Del aguerrido minero
de la zona del carbón
trajo un saludo y canción
un muy digno compañero.

GLOSA:

Un gratísimo recuerdo
nos ha dejado el torneo
y el más brillante deseo:
trabajar por los acuerdos;
y yo esta versión no pierdo
para decir lo que quiero
con un afecto sincero
que pongo en esta ocasión
pa agradecer la atención
del aguerrido minero.

Muchos saludos llegaron
a nuestro Primer Congreso
por lo que yo en este verso
doy gracias a los que enviaron
más a aquellos que aportaron
con notable decisión
demostrando su atención
en una actitud concreta
pa que viniera un poeta
de la zona del carbón.

Don Juan 2° Placencia,
gran poeta popular,
no se hizo de rogar
pa honrarnos con su presencia;
activó las diligencias
y con gran satisfacción
pronto estuvo en reunión
llegando de los primeros
y para sus compañeros
trajo un saludo y canción.

Con entusiasmo cantó
sus bellas composiciones
y robando corazones
mil aplausos recibió;
y en sitio de honor sentó
su gran figura primero
llevándose por su esmero
una vicepresidencia
el gran poeta Placencia
un muy digno compañero.

DESPEDIDA:

Me despido saludando
a toditos los mineros
y a nuestros dos compañeros
que están allí trabajando;
hemos estado pensando
si el tiempo lo facilita
hacer, pues, una visita
a la zona del carbón
en benéfica función
que nuestra Unión necesita.

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Por la liberación de América

Por la liberación de América
por Julio Solís, poeta popular de Chimbarongo

CUARTETA

Abajo el imperialismo
de los norteamericanos
esclavizan sus hermanos
con el cuco ‘el comunismo.

GLOSA

Tiempo es que la libertad
brille ya como un lucero
y con voluntad de acero
por la buena vecindad;
que se acabe la ruindad
de los amos del fascismo
y termine el vandalismo
de los vampiros del Norte
Braden y toda su corte
¡abajo el imperialismo!

Vivimos encadenados
todos los americanos
aunque somos sus hermanos
por acuerdos y tratados;
como infames condenados
y con recursos insanos
atados de pies y manos
nos llevan al sacrificio
este es el único oficio
de los norteamericanos.

Llamo al yanqui libertario
que también es explotado
por los gangsters desalmados
con sentido lapidario;
que castigue estos falsarios
guerreristas inhumanos
que no maten más coreanos
déjenlos en libertad
acaben con la ruindad
que esclavizan sus hermanos.

Intercambio ‘e relaciones
con el noble pueblo ruso
al fin la razón impuso
muy nobles proposiciones
que hayan pues negociaciones
con la patria ‘el Socialismo
y juera el imperialismo
que aquí ya nadie se venda
y se acabe la leyenda
con el cuco ‘el comunismo.

DESPEDIDA

Y así surgirá el destino
de mi Chile tan querido
sol de libertad perdido
encontrará su camino
y el instrumento asesino
detenido por la paz
y el pensamiento falaz
se quedará sin cabida
no habrá lucha fratricida
en el mundo nunca más.

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Fantasías para ellas

Fantasías para ellas
por Luis Polanco, poeta popular de Conchalí

Dama en tu pupila de uva
una sonrisa rosada
dame de las llamaradas
de tus ojos una lluvia;
y en tu pestañita  rubia
la sed para mi quimera,
tus labios de rosa perla
dame en el alba que viene,
dame del jardín que tienes
aromas de primavera.

De suspiros y siemprevivas
yo te haré cintas pal pelo
te haré blusas y pañuelos
en rayos de sol tejidas;
y de las aguas dormidas
en marco de oro y estrellas
te haré la luna más bella
del espejo en que te mires,
combinación de jazmines
de clavelinas, polleras.

En tus labios entreabiertos
dame un poquito de miel
y a mi amargura de hiel
dale el dulzor de tu aliento;
y dame en un pensamiento
las caricias de tus ojos,
y en un clavelito rojo
el rubor de una promesa,
y en tu fuente de ternezas
de ilusiones un manojo.

De los suspiros del agua
con reflejos tornasol
yo te daré un quitasol
y encajes para la enagua;
te haré de rosa y de malva
un primoroso sostén,1
en manos de amanecer
te daré aurora y armiño
y te daré en mi cariño
las canciones del verjel.

DESPEDIDA:

Entre tu alma y la mía
de ópalos haré un camino,
de espigas, cereza y vino
te cantaré melodías;
en cordajes de alegría
te mandaré despertar,
y de topacio y cristal
para tu amor haré cuna,
de violetas y de luna
te tejeré un madrigal.

1  Errata del impreso, esta línea aparece dos veces.

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A la memoria de Ricardo Fonseca

A la memoria de Ricardo Fonseca
por Miguel Luis Castañeda, poeta popular de Cogotí

CUARTETA

Al hombre bueno y amable
Secretario ‘e su Partido
irá el pensamiento mío
a su tumba a verlo estable.

GLOSA

En el cuarto aniversario
de ese día de tu muerte
irá a verte mucha gente
a tu lecho y tu calvario;
Ricardo Fonseca Aguayo,
tu conducta fué intachable,
recordarlo será dable
y en este día de hoy
saluda mi corazón
al hombre bueno y amable.

Hermanos emocionados
te rendirán homenaje
y te adornarán el traje
con cariño y con agrado;
por la huella que has dejado
tendrás ese merecido
nunca estarás en olvido
por la obra que tú hiciste
recordamos que tú fuiste
Secretario del Partido.

Y lamentamos la ausencia
de cuatro años ya sin verte,
lo quiso la ingrata suerte
que te fueras con tu ciencia;
dejaste sabia experiencia
en este pueblo dolido
que se encuentra conmovido
y hoy te saluda y recuerda
y junto con sus ofrendas
irá el pensamiento mío.

Tu cuerpo, Ricardo, ha muento1
pero tu espíritu vela
y observas y eres tutela
de los que viven por cierto;
pareces estar despierto
mirando a los miserables
y la vida insoportable
que sufren tus compañeros,
¡vengan todos los obreros!
a su tumba a verlo estable.

DESPEDIDA

Maestro y buen camarada
esta ofrenda es mi tributo
que yo envío a tu sepulcro
que es tu lecho y tu morada;
tu tumba estará adornada
de recuerdo y no me olvides
que el cariño no se mide
cuando es pa quien lo merece
porque de tí mismo crece
roja flor que siempre vive.

1  Errata del impreso, debiera decir “muerto”

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El zancudo grandote

El zancudo grandote
por Venancio Castañeda
NOTA: Enviado por Luis Castañeda, quien lo ha recogido de labios de su padre, el cual  lo aprendió, a su vez, de Venancio Castañeda, padre suyo y abuelo de Luis.

CUARTETA

Volaba más que un halcón
un zancudo tamañazo
tan sólo de un aletazo
mató un traro copetón

GLOSA

Un zancudo traficante
andaba de tal manera
que a tal enorme carrera
no iguala el judío errante;
él andaba en un instante
del Oriente al meridión
y cuando hace retención
como azogue se resbala
y cuando abría las alas
volaba más que un halcón.

Desde animal se sabía
y de lecturas se cuenta;
tenía dos mil doscientas
y de leguas muy medidas
este bruto combatía
con tigre y liones bravazos
cuando se llegaba el caso
también le hacía desdén,
brama más juerte quel tren
un zancudo tamañazo.

Este animal tan profundo
era overo por la guata,
cuando se abría de patas
no cabía en todo el mundo,
por eso yo me confundo
créanmelo ques razón;
él llegaba a la estrición
hasta elevadas alturas;
y por una travesura
mató un trato copetón.

Este animal tan sequento
una vez que agua tomó;
entero el mar lo secó
tan sólo con el aliento,
cuando sale a campamento
no le tome a los balazos;
menos a los cañonazos
cuando le formaban guerra;
hacía temblar la tierra
tan sólo de un aletazo.

DESPEDIDA

Por fin doy la despedida
por el zancudo grandote
se junta del sur al norte
el puelche y la travesía;
lo vieron pasar un día
para el puerto de Pisagua;
y en el valle de Aconcagua
treinta mil güeyes mató,
después que se los comió
era pior que lampalaguas.

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El organillo

El organillo
por Ricardo Gonzalez, de Viña del Mar

CUARTETA

Mil recuerdos del pasado
invaden mi pensamiento
con notas como lamentos
de los tiempos olvidados

GLOSA:

El hombre del organillo
encorvao va pasando
con un monito saltando
y rodeao de chiquillos;
hombre de rostro sencillo
por el calor ya tostado
un lorito poco hablao
haciéndole compañía,
encierran sus melodías
mil recueros del pasado.

Junto a “LADRILLO” lejano
o “CORAZONES PARTIDOS”
vuelven los tiempos ya idos
recuerdo padres y hermanos;
luego sale “AMOR PAGANO”
para juguete del viento
aentro del alma siento
ansias de niñez de nuevo
deseos que hacer no puedo
invaden mi pensamiento.

Un diez de té, veinte’e pan
pa toíta la familia
no conocimos vigilia
para comprar no hubo afán;
tiempos que pronto se van
recuerdo con sentimiento
al compás del instrumento
que sigue siempre tocando
va mi vida desfilando
con notas como lamentos.

Unas chiquillas riendo
con la suerte’ el papelillo
mientras toca el organillo
más serias se van poniendo;
mi divagación suspendo,
el organillo ha callado;
un manotón al pasado
dió un parlante prepotente,
dejó las notas pendientes
de los tiempos olvidados.

DESPEDIDA:

Por fin se va el hombrecito
con su carga musical,
ese mono sin igual
y aquel loro calladito;
ganando chauchas, pesitos
se oye a lo lejos tocar,
un perro se siente aullar,
los recuerdos se van lejos,
y aunque nos sentimos viejos
no dejamos de cantar!

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