Apocalipsis
por Manuel Urbano, poeta popular de Puente Alto
Firmo y acudo al llamado
de las fuerzas de la paz,
temo, por la Humanidad
vil acción de los malvados;
El momento ya ha llegado
de definir posición,
los hombres de promisión
frenarán a los perversos,
que holocausto del universo
harían por su ambición.
En temible comunión
los Caines y los Judas
con las acciones más rudas
al mundo llenan de horror;
hambre, miseria y terror
es su ciencia negativa.
Por la paz, mi rogativa
se hace tema en mi conciencia,
mi verso, con elocuencia
canta al trabajo, al amor.
Paraíso de esplendor
la tierra debiera ser;
El hombre podría hacer
en paz, trabajo y amor;
–Superando al Hacedor–
tantas cosas colosales,
que amplias rutas celestiales
unirían sus inventos,
y la unión de los talentos
desterraría los males.
En reductos infernales
se refugian los canallas
y el dinero y la metralla
con sus dioses más formales;
Y sus ritos fantasmales
de fetiches y de espectros
los acusan del siniestro
pavoroso de la guerra
apocalipsis que aterra
conmoviendo al universo.
¡Y llora conmigo el verso… !
por la muestre están doblando
las campanas, y anunciando
con infame sacrilegio,
–para el bronce y sus arpegios–
los instintos de los viles.
¡Qué caracho! Los serviles
prostituyen los valores
falsos cristos redentores
que procrean los Caínes.