Andando de farra
Por René del Cerro, poeta popular de Linares.
Invitome mi amigo
a tomar con ansia loca.
La plata mía era poca,
por eso acepté; lo digo.
Fuimos a donde la “Rigo”
que tiene un regio chinchel
y es amarga como hiel
cuando no le tiran bola,
por eso siempre está sola
por la mañosa y lo cruel.
Cuando estuvimos curaos
y nos dió la pataleta,
fuimos a donde la “Peta”
que tiene un brazo safao,
y un talle muy encachao
como pa soñar despierto
y unos ojos tan abiertos
como focos de camión.
Créanme que esta cuestión
que les cuento, es muy cierto.
Nos sirvieron mote e’ mey
mientras que mataba un gallo,
también charqui de caballo
y asado de carne ‘e buey.
Nos festejó a cuerpo ‘e rey,
mi amigo pagó la cuenta
y bailamos unas vueltas
como trompo ya cucarro,
pues tomábamos en jarros
que estaban para la venta.
Fuimos pá onde la Lola
que vive pal lao el bajo
y comimos a destajo
en la misma cacerola;
nos tocaron la vitrola
y se armo otra vez la farra
con cueca tocá en guitarra
que la bailé con la Rosa
y a los pies de esa preciosa
me caigo si no me agarra.
DESPEDIDA
Al final de este contento
no teníamos ya plata.
Curados hasta las patas
hicimos un perro muerto;
pero en el mismo momento
llegaba la policía,
que a su manera entendía
como era aquel asunto
y quedamos los dos juntos
presos hasta el otro día.