Abandono del campesino
por Miguel Luis Castañeda
CUARTETA
Son las penas del Infierno
que sufre el campesinado
su sufrimiento es eterno
los tienen desamparados,
GLOSA
En este departamento
llamado Combarbalá
hay gente a pata pelá
hambriados y muy chilpientos
que ya los levanta el viento,
la vida se les’ta yendo
la muerte los’tá yendo
a puro pan todo el día
es mucha la tiranía
son las penas del infierno.
Cada fundo un calabozo
donde pregona un patrón
y donde se explota al peón
y este anda todo haraposo;
mugriento y harto rotoso
batallando en el arado
con hambre, sol y arrugado
por el salado sudor
trabaja de sol a sol
¡que sufre el campesinado!
De los sueldos pa qué hablar
no pasan de quince pesos
y una telera’e pan grueso
que cuesta para pasar;
de llapa tiene el canal
es un crimen muy horrendo
el peón sigue pues sufriendo
con un mayordomo al lado
lo tienen muy amargado
su sufrimiento es eterno
Nuestros malos gobernantes
se olvidan del campesino,
su proceder es indino
nos mantienen ignorantes;
somo ejército ambulante
en campos diseminados
los burgueses y el Estado
nos hacen pagar el pato
prohíben los sindicatos
los tienen desamparados.
DESPEDIDA:
Por fin somos productores
producimos pal patrón
y nos paga ese bribón
con desprecio y sinsabores;
engordan esos señores
y se visten a su antojo
son cuervos que comen ojos,
piuchenes que chupan sangre
y nos tienen como enjambre
todos comidos de piojos.