A mi Curicó querido

A mi Curicó querido
por Francisco Ruz, poeta popular de Curicó.

Tan lindo que es Curicó
con sus calles bien aseadas,
están hoy pavimentadas
porque el pueblo lo pidió;
del pobre y rico salió
pa ponerle pavimento.
El curicano contento
vive en su ciudad natal.
No hay otra ciudad igual
en Chile por el momento.

Esto dicen los viajeros
que viajan de sur a norte;
no hay un pueblo por su porte
pues Curicó es el primero.
La gente con gran esmero
es toda muy cariñosa.
Una alameda frondosa
tiene al pie de un lindo cerro,
arriba una cruz de fierro
con una virgen preciosa.

Desde el cerro se domina
toda esta hermosa ciudad
y también la majestad
de nuestras cumbres andinas.
De las aldeas vecinas
hay micros a cada rato,
de donde vienen los ñatos
sus negocios a vender,
para almorzar o comer
hay partes donde es barato.

Es famosa por sus tortas
esta mi tierra querida
por la cual daré mi vida,
que una vida poco importa;
mi Curicó bien se porta
cuando llega gente extraña;
aquí no hay gente tacaña
todos somos cariñosos
por eso somos famosos,
porque no tenemos mañas.

DESPEDIDA:

Al fin, el mejor de Chile,
es el rodeo de aquí,
y es alegría pa mí
ver a los huasos por miles;
En un tremendo desfile
llegan a la media luna
las parejas de una a una
a luchar por el champión
corriendo sin compasión
como la Diosa Fortuna.

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