A la cárcel los pulpos de la locomoción
Por Francisco Díaz, poeta popular de Curanilahue
CUARTETA:
Sufren Santiago y el Puerto
pésima locomoción
pasa igual en Concepción
y nadie arregla este entuerto
GLOSA:
Subirse a un micro o tranvía
a la hora de las doce
es martirio que conoce
toda la ciudadanía;
ayer no más me decía
mi compaire ño Roberto
“de ver tanto abuso, cierto,
más de un “pulpo” mataría,
ésto pasa día a día”
sufren Santiago y el Puerto
Hay que ver la rabia grande
que el pueblo está acumulando
con tanto abuso aguantando;
es pa’ podrirse la sangre;
conviene que se le mande
a los que hacen irrisión
de toda la población
que ya la vayan cortando,
tantos años soportando
pésima locomoción
En tanto los muy logreros
dueños de los microbuses
se rien a todas luces
de miles de pasajeros;
cada vez más altaneros
siguen en su explotación
cunde pues la indignación,
más si los pobres reclaman
“agitadores” les llaman
pasa igual en Concepción
A las siete de la tarde
son los peores atracones
y en las aglomeraciones
el bolsillo Dios nos guarde;
los “lanzas” sin mucho alarde
a quien pillan boquiabierto
como en un sitio desierto
lo trajinan a su gusto,
después se siente el disgusto
y nadie arregla este entuerto.
DESPEDIDA:
Y los que más pena dan
son los “cabros” colegiales
hay que ver que son fatales,
esperan con tanto afán;
los micros repletos van,
como no pagan tres pesos
horas y horas como lesos
ahí tienen que esperar,
ésto debe terminar
metiendo a los “pulpos” presos.