A Caupolicán
por Hugo Amador, poeta popular de Chuchunco.
Por el gran Caupolicán
ejemplo de nuestra raza
que no precisó coraza
para alzarse colosal;
hoy levanto un pedestal
a su gloriosa memoria
grande como la de Prat
y no bastaran jamás
los elogios a su historia.
Te contempló entre los bosques
demostrando tu gran fuerza
y en batallas tu destreza
de muy grande y hábil toqui;
tú defendiste al toque
de tambores y trutrucas
vuestra tierra y vuestras rucas
vuestro orgullo y vuestro honor
humillando al invasor
que no te doblegó nunca.
Te contemplo ante la pica
con tus grandes ojos fijos
contemplar así a tu hijo
sin arredrarte ni pizca;
brilló ahí la fuerza rica
que afluía de las selvas
fuiste grande sin reservas,
indomable como el puma
¡El Arauco fue tu cuna
y la Fresia fue tu perla!
Ah, crueles aventureros
que creían doblegar
una raza al desgarrar
la entraña del prisionero;
pero floreció más fiero
el valor en ese vientre
pues no hubo ni en su frente
una mueca de dolor
ni solicitó favor
en esa horrorosa muerte.
DESPEDIDA
Por fin, gran Caupolicán
es tu gesta quien reclama
aquella justicia humana
pa tus hijos que hoy están
defendiendo con afán
la libertad ‘e la Nación
de ese yanqui estafador
que a nuestra soberanía
la ofende día por día
y mancha tu tradición.